Se denominará Curie y se instalará en América Latina para proveer el servicio en la nube. Es la primera conexión totalmente privada en el ámbito internacional
Google invertirá en el desarrollo de un cable submarino, que denominará “Curie” -en honor a la renombrada científica Marie Curie-, que será instalado en América Latina para mejorar su infraestructura en la nube.
“Curie es excepcional: es el primer cable submarino que llega a Chile en aproximadamente 20 años. Una vez instalado, será una de las ‘autopistas’ de datos más grandes del país, conectando Chile y California en el año 2019”, remarcó el gigante de Internet en su blog.
Junto a Curie, Google planea invertir, además, en otros dos cables: Havfrue, que conectará Estados Unidos con Dinamarca e Irlanda; y el HK-G, que interconectará los principales centros de comunicación submarinos en Asia.
“Estas inversiones en conjunto mejoran aún más nuestra red, la más grande del mundo, que según algunos cálculos administra 25% del tráfico mundial de Internet”, destacó.
En relación con Curie, el nombre fue elegido en honor a Marie Curie, la renombrada científica que condujo una serie de investigaciones pioneras en el campo de la radioactividad.
La decisión de instalar el cable en América Latina se debió a que “si bien la región tiene una alta penetración de Internet, no está servida de forma óptima por las conexiones de datos internacionales existentes”, explicó.
“Esto significa una increíble oportunidad para que la plataforma Google Cloud, a través de esta nueva infraestructura, pueda servir a nuevos negocios y para que Google pueda continuar avanzando en su meta de largo plazo de llegar a los ‘próximos mil millones’ de usuarios de Internet”, remarcó.
Aunque éste es el noveno cable submarino que esa firma instala en el mundo, será el primero totalmente privado en el ámbito internacional.
“Nuestra inversión en el cable Curie es parte de un continuo esfuerzo de mejorar la infraestructura global y nuestro compromiso con Latinoamérica”, destacó.
En todo el mundo, la red de Google tiene más de 100 puntos de presencia y 7.500 nodos.
Todas estas “partes” de la nube están conectadas por una gran red que incluye 11 cables submarinos y miles de kilómetros de fibra óptica alrededor del mundo.