La elaboración de biogás a partir del estiércol de vaca generado por la producción en feed lot y tambos en las provincias de Buenos Aires, Córdoba y Santa Fe es uno de los proyectos de combustibles alternativos que prevé culminar en 2010 el Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI).
El organismo trabaja en varias iniciativas destinadas al aprovechamiento de desechos en la producción vacuna, de pollos, orujo de vino y otros residuos industriales orgánicos.
El biogás es originado por las bacterias que degradan la materia orgánica (restos de comida, vegetales, bosta de vaca, de chancho, etc.) en ausencia de aire (anaeróbico). El biogás está compuesto principalmente por metano (el mismo componente del gas natural), dióxido de carbono (el gas que expelemos al respirar), agua y sulfuro de hidrógeno (SH2) (que le da olor a huevo podrido, permitiendo detectar fugas en la instalaciones). Los proyectos se encuentran en diferentes etapas de desarrollo a cargo de grupos interdisciplinarios de profesionales capacitados en biogás dentro de INTI, que trabajan en diferentes localidades del país. Participan ministerios, municipios, centros comunitarios, centros educativos y universidades, con las las cuales se firmaron convenios para resolver problemas ambientales.