Javier Milei llegó a Roma y si bien ya no luce enojado y en su entorno dicen que “se enfrió”, lejos de haberse arrepentido al blanquear su malestar con los gobernadores y los diputados, está convencido de que lo ocurrido en torno a la ley ómnibus no puede “dejarlo pasar” y que lo obliga a a reconfigurar sus acuerdos políticos y, en consecuencia, a un rediseño de su Gabinete.
Por eso, respaldó los dichos de Patricia Bullrich, quien sostuvo que “no se puede estar en la misa y la procesión al mismo tiempo”, en clara relación a los funcionarios del Ejecutivo que responden a gobernadores cuyos diputados votaron artículos contra su proyecto.
La ministra además responsabilizó a los funcionarios “por lo que hacen sus familiares”, en clara referencia al titular de la ANSeS, Osvaldo Giordano, cuya esposa, la diputada nacional Alejandra Torres, votó en contra de varios artículos.
Giordano tendría su despido ya asegurado, sostienen desde el entorno del Presidente. Pero no es el único de los que responden al ex gobernador cordobés Juan Schiaretti, y al actual Martín Llaryora: en la primera línea del Gabinete: también están en la mira el secretario de Transporte, Franco Mogetta; y el presidente del Banco Nación, Daniel Tillard (el único que podría “salvarse).
De todos modos, la “depuración” de la que se habla en el Gobierno no sería lineal, en función de la pertenencia de origen, sino que se analiza “caso por caso”. “No son todos lo mismo”, argumentan.
El jefe de Estado, que aterrizó en Italia a las 10.28 de Argentina (14.28 hora local) de este viernes para reunirse con su par Sergio Mattarella, la primera ministra, Giorgia Meloni, y mantener su primera audiencia con el Papa Francisco, les confió a sus íntimos que “la decisión ya está tomada” y que, una vez que vuelva a Buenos Aires el próximo martes tiene previsto hacer cambios en el Ejecutivo: “Espero que se vayan solitos. Si no se van, los rajo”, dijo, según reconstruyeron fuentes de la comitiva oficial.
“Los cambios ya están en marcha, pero no se hacen de un momento para el otro”, completó ante un interlocutor de su confianza que le consultó por las declaraciones de Bullrich, que volvieron a instalar la idea de que puede haber represalias contra funcionarios del Ejecutivo que se incorporaron como parte de los acuerdos que tejió antes de asumir con sectores no kirchneristas.
Milei evalúa los pasos a seguir, con la premisa que el bloqueo al proyecto “Bases para la libertad de los argentinos” lo obligan a recalcular la hoja de ruta de su gobierno y también los eventuales acuerdos políticos. “Lo que no pasó en el Congreso no se puede dejarlo pasar así nomás”, argumentan cerca del jefe de Estado.
Consecuencias de elegir a un DD=DEMAGÓGO DEMENTE.