El Poder Legislativo del país vecino aprobó una legislación que establece que cada municipio
deberá crear las reglas para la prestación del servicio. En España, podrá trabajar amparada en la figura jurídica de alquiler de vehículo con conductor
El Poder Legislativo brasileño reguló en el ámbito nacional de ese país el funcionamiento de la empresa de transporte Uber.
Ésta tiene unos 20 millones de usuarios y 500 mil choferes en Brasil y la norma aprobada, que irá a “sanción presidencial”, establece que los municipios crearán reglas y fiscalizarán el servicio que prestan, pero que no podrán controlarlo mediante la emisión de licencias.
En tanto, Uber está a punto volver a Barcelona, España, tres años después de su primer intento. Podrá desenvolverse con la estructura jurídica prevista por la ley de alquiler de vehículo con conductor. En Argentina, la batalla judicial que enfrenta la compañía está lejos de solucionarse pero Justin Kintz, director de Asuntos Regulatorios de América Latina de Uber, confirmó que planea quedarse y expandirse a otros distritos.
Kintz valoró que los problemas que la empresa enfrentó en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA) ocurrieron por no haber dialogado con el sector público y otros actores del sistema de transporte antes de poner en marcha la aplicación, y confirmó que la estrategia será ir por la regulación. La Comisión de Tránsito y Transporte de la Legislatura porteña ya recibió un proyecto para normar la actividad de Uber y ésta sostuvo que se adaptará a la legislación que se apruebe.
Precedente local
Hay un precedente favorable para los planes de la empresa. Hace un año, la Justicia federal determinó que cada jurisdicción debe resolver qué hace con los conflictos que puede suscitar la operatoria de Uber.
Lo estableció la Sala I de la Cámara en lo Civil, que se declaró incompetente para entender en una acción declarativa de certeza iniciada por un chofer que buscaba un pronunciamiento que expresara que los servicios que ofrece no están prohibidos.
El actor alegó que los conductores son socios y que celebran “acuerdos privados de transporte” que no están vedados. Además, afirmó que esa relación contractual está comprendida en el Código Civil y le reclamó a la Justicia que aclarara que en la CABA no se requiere permiso o licencia, salvo las que se refieren a la habilitación del vehículo para transitar por la vía pública. El a quo se declaró incompetente y consideró que debía intervenir el fuero en lo Contencioso-administrativo y Tributario de la ciudad. El accionante apeló pero la alzada confirmó la competencia de los tribunales porteños porque no se cuestionó ningún acto ni norma dictada por autoridades nacionales vinculada con el servicio.
Mercado
– Brasil es el segundo mayor mercado de Uber después de Estados Unidos.
– El país vecino es uno de los lugares más competitivos para aplicaciones como Uber y Cabify, por las falencias del transporte público y la preocupación por la inseguridad.
n “La Cámara de Diputados dio un paso más para que Brasil tenga una reglamentación moderna, que haga un buen uso de la tecnología para el bien de las personas y de las ciudades”, afirmó Uber mediante un comunicado.