ESCUCHARNavarro festejó su designación con los empleados de la Justicia federal. Montesi y Ávalos dijeron que priorizarán la resolución de causas previsionales. Alertaron sobre que suman 4.000 los expedientes ingresados este año.
Después de seis años, la Cámara Federal de Apelaciones de Córdoba volvió a quedar conformada en su totalidad con tres nuevos miembros, dos de ellos mujeres quienes, por primera vez en la historia, logran integrar el máximo órgano de la Justicia federal.
Graciela Susana Montesi, Liliana del Valle Navarro y Eduardo Daniel Ávalos juraron ayer al mediodía como jueces de la Cámara Federal, por haber sido designados por la presidenta Cristina Fernández.
Mientras en la sala “Agustín Díaz Bialet” de los Tribunales Federales, el ministro de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, Juan Carlos Maqueda, les tomaba juramento a los nuevos miembros, en las inmediaciones hubo bombos y cornetas de empleados del gremio judicial, quienes llegaron al lugar para respaldar el juramento de Navarro, vinculada con ese sector.
Al concluir el acto, visiblemente feliz, la nueva camarista -reconocida en el ambiente por su alto perfil- aseguró que continuará en esa línea: “A la gente le gusta saber qué pasa en la Justicia y eso intentaré hacer: responder todos los requerimientos”.
Consultada por la prensa, no dudó en admitir que hacía muchos años esperaba “este momento”. A su vez, dijo que llegó a la Cámara Federal para “arremangarse y ponerse a trabajar” .
La prioridad
Ya suman 4.000 los expedientes remitidos desde la Cámara Federal de la Seguridad Social que tiene que resolver la Cámara Federal de Córdoba.
La “lluvia” de expedientes se produjo después de la decisión de la Corte Suprema de Justicia de permitir que las cámaras de apelaciones federales de las provincias intervengan en materia previsional, con una acordada que surgió tras un fallo por el caso Pedraza (jubilado tucumano) contra la Administración Nacional de la Seguridad Social (Anses).
La situación fue alertada tanto por Montesi como por Ávalos, quienes aseguraron que será prioridad la resolución urgente de esos casos. Ávalos dijo que el primer paso será clasificar los expedientes. Remarcó, a su vez, que seguramente podrá sumarse otra cantidad de causas provenientes de los juzgados federales.
La mayoría de los juicios apunta al reajuste de haberes, en dos versiones: la actualización desde el fin de la convertibilidad hasta la aplicación de la nueva ley de movilidad o el reajuste del haber inicial tomado como base para calcular el beneficio.
Por una Justicia más democrática
Tras prestar juramento, Ávalos, hasta hoy secretario Civil de la Cámara Federal de Córdoba, dijo que luchará por una justicia más democrática. “La sociedad ve la justicia como una elite y yo estoy lejos de ser elitista”, subrayó.
Objeciones
Las mujeres camaristas
En el Senado de la Nación, cuando el Poder Ejecutivo envió los pliegos de las nuevas camaristas Liliana Navarro y Graciela Susana Montesi, el proceso de selección incluyó objeciones para ambas por parte de dos abogadas cordobesas. Navarro fue impugnada por haber estado casada durante 15 años con Pedro Nolasco Bustos, actualmente condenado a prisión perpetua por delitos de lesa humanidad durante la dictadura. Por su parte, Montesi fue objetada porque mantiene una relación sentimental con otro camarista federal, Abel Guillermo Sánchez Torres.
Las salas
– Graciela Susana Montesi y Eduardo Daniel Ávalos (actuales secretarios del fuero Civil del cuerpo) se sumarán a la Sala “A” de la Cámara, que también integra Luis Roberto Rueda y que hasta ahora debía ser completada con subrogantes.
– Por su parte, Liliana Navarro, quien venía desempeñándose como secretaria Penal del Juzgado Federal Nº 1, se sumará a la Sala “B” de la Cámara, que también conforman Ignacio Vélez Funes y Abel Sánchez Torres.
