ESCUCHARDesmintió los dichos de los ex jefes de Policía César Almada y Carlos Galbucera sobre su ausencia durante la revuelta. Aseguró que “hubo gente” de Buenos Aires incitando los saqueos. También declaró el comisario Alejandro Mercado
El comisario retirado Julio César Suárez desmintió ayer las versiones del ex jefe de la Policía de Córdoba, César Eduardo Almada, y del subjefe, Carlos Galbucera, sobre su ausencia durante el acuartelamiento policial de diciembre de 2013.
Ante la Cámara 12ª del Crimen, Suárez resaltó que, por el contrario a lo que se dice, estuvo trabajando y colaborando con la seguridad por más de 40 horas.
“Trabajé desde las 2 de la mañana de la reunión, trabajé todo el día martes a la noche, miércoles a la madrugada y a las 13 del jueves almorcé con el Estado Mayor, el miércoles a la noche pasé por la casa de mi hija y con la autorización de (Carlos) Galbucera me volví a (Villa) Rumipal”, explicó.
“El día viernes volví”, subrayó, y agregó: “A las 13.30 nos convoca el jefe de la Policía a un almuerzo, se sirvió un muy buen almuerzo, al jefe lo vi contento, bastante eufórico porque habían logrado solucionar el problema y firmar un acuerdo, la sensación mía era de tristeza”.
En otro tramo de su declaración, el comisario sostuvo que “posiblemente había gente de Buenos Aires queriendo incitar el conflicto que finalmente terminó con los saqueos”.
“Es lo que me informó López”, dijo Suárez en un momento de su declaración. Jorge López era jefe de Información Criminal en 2013 y fue el encargado de investigar los saqueos.
Relató que policías con los móviles de la Caminera eran amenazados por otros de civil, arma en mano, para que se plegaran al reclamo, y que hasta les cortaron la radio a algunos móviles para que no pudieran acudir a los llamados de auxilio en distintos puntos de la ciudad de Córdoba.
Otros testigos
Además de Suárez, también declaró el comisario mayor Alejandro Mercado, de Investigaciones Criminales, quien durante las jornadas de acuartelamiento tenía el grado de comisario inspector. Ante el tribunal explicó cómo fue comisionado para investigar la actuación de los 56 policías que finalmente llegaron a juicio.
Mercado respondió a preguntas y dio detalles del informe que elaboró con datos reportados del 101 en el que se marcó en color rojo a unas 18 duplas de agentes de nueve móviles, como quienes supuestamente arengaron al acuartelamiento la noche del 3 de diciembre de 2013. El funcionario dijo que el informe fue hecho con base en el sistema de radares ABL, que permite ubicar la posición geográfica de los móviles policiales, los reportes al 101 y los libros de guardia.
Los 56 policías aparecen en el informe marcados con rojo (los que arengaron), amarillo (a quienes debía investigarse con mayor profundidad) y azul (de quienes no se tenía información porque no se reportaron).
Cabe recordar que los policías están imputados por “desobediencia a la autoridad, aplicación indebida de caudales públicos, incitación a cometer delitos e incumplimiento de los deberes de funcionario público”.
