Si el domicilio no existe, la apelación no corre

Para la Cámara 8ª en lo Civil y Comercial de Córdoba, fijar una dirección inexacta equivale a omitir la carga de la prueba. Con base en ese fundamento, el recurso opuesto por el accionante fue declarado desierto. [privado] Luego de determinar que el hecho de constituir un domicilio procesal que en realidad no existe equivale a que el litigante omitió la carga de fijarlo, según dispone el articulo 367 del Código de Procedimiento Civil y Comercial, la Cámara 8ª del fuero declaró desierto el recurso de apelación interpuesto por el accionante en el juicio iniciado en la sede judicial de Carlos Paz, en el cual el apelante designó como propia una dirección que, según informó el oficial notificador, resulta inexistente en la ciudad de Córdoba. El abogado Alejandro Laión, en representación de la demandada y de Federación Patronal Seguros SA, solicitó la deserción de la impugnación incoada por el demandante, después de que -por la razón antedicha- resultó infructuoso el diligenciamiento de la cédula por la cual se intentó correr traslado para expresar agravios al domicilio de calle Ayacucho 445, fijado por el recurrente. El Órgano de Alzada, integrado por Héctor Hugo Liendo, Graciela Junyent Bas y José Manuel Díaz Reyna, le dio la razón al apoderado de la accionada y de la citada en garantía, declarando desierto el remedio procesal entablado por el demandante. En sus fundamentos, el fallo expuso que en virtud de que el notificador “informa la imposibilidad de diligenciar la notificación por no existir el número 445 de la calle Ayacucho, al que se dirige la cedula (…) se torna operativa la previsión del artículo 367 del C.P.C.C. puesto que la constitución de un domicilio inexistente equivale a la no constitución de domicilio, y torna imposible notificar al apelante en la ciudad sede del tribunal de apelación”. Al respecto, el pronunciamiento trajo a colación doctrina emanada de Oscar Hugo Vénica, que informa que la mentada carga de constituir domicilio “significa señalar una dirección concreta: calle y número”, por lo que “la ausencia de una de esas condiciones importa que no hay domicilio constituido (…) lo mismo si la dirección es inexistente”. En función de ello, en definitiva, la Cámara resolvió que la impugnación ordinaria promovida por el demandante debe ser declarada desierta e impuso las costas del recurso al apelante. Autos: “FINISHMENT S.A.- PEQUEÑO CONCURSO PREVENTIVO (EXPTE. N° 2595172/36)”

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