Ordenan resarcir la muerte de un trabajador rural cuando cumplía con sus tareas

Al demostrarse mediante testimonial y otras probanzas el vínculo entre el fallecido y quien fue su empleador, el tribunal condenó a éste a indemnizar a la concubina accionante, con fundamento en la LCT, y a la aseguradora, en la LRT

Al acreditarse la existencia de relación laboral y que el accidente que causó la muerte al trabajador rural fue en ocasión de cumplir sus tareas, la Sala 1ª de la Cámara del Trabajo de Córdoba condenó al ex empleador a pagarle a la concubina del fallecido la indemnización del artículo 248 de la Ley de Contrato de Trabajo (LCT).

Asimismo, dado el carácter laboral del siniestro, se condenó a la aseguradora SMG ART a abonar los resarcimientos de la Ley de Riesgos del Trabajo (LRT), ya que pese a que el ex empleador no había denunciado al trabajador fallecido en la nómina de empleados asegurados, el artículo 28 de esta norma ordena su pago, que luego podrá reclamarle al contratante.

El tribunal integrado por el vocal Enrique Rolón analizó la existencia del vínculo laboral, indicando que la actora afirmó que el trabajador se desempeñó a las órdenes del demandado realizando tareas de mantenimiento, corte de pasto, carga de pollos, conducción de vehículos a los fines de compra de insumos y transporte de pollos y huevos.

Señaló que el accionado negó la existencia de dicho vínculo y reconoció que el fallecido realizó en diferentes momentos tareas de mantenimiento o reparación de ventiladores, cortadoras de pasto, tareas en el jardín o limpieza y en cada oportunidad que realizó alguna tarea se le pregunto cuanto cobraría por ello abonándole el importe convenido.

Así, tras valorar la prueba, el juez sostuvo que el demandado no logró acreditar que el trabajador desarrollara la actividad por cuenta propia o que se lo pudiera calificar como un prestador autónomo o independiente.

El tribunal remarcó que la prestación personal de tareas por parte del fallecido fue corroborada por la informativa de Central Rodamientos SRL, en la que se expresó que “era habitual que el señor R. pidiera presupuestos respecto de repuestos, herramientas o insumos para el señor P.”, agregando que ello también resultó confirmado por el informe remitido por el Taller Le Monde.

Además, se indicó que tampoco se demostró que R. aportara algún medio material para desarrollar su labor, sino que por el contrario el mismo P. señaló que en numerosas oportunidades le facilitaba su vehículo personal para “buscar repuestos o para realizar tareas de reparación”, lo que fue corroborado por la confesional ficta del demandado al tenerse por cierto que R. tenía acceso a los vehículos de la empresa y que a la fecha del fallecimiento del mismo, conducía uno de ellos.

Detalle

Sobre la existencia o no del accidente de trabajo narrado en la demanda y el carácter del mismo, el juez indicó que la actora refirió que R. el día 12 de noviembre de 2012, al salir del negocio “Central Rodamientos”, al que concurrió para comprar repuestos y pedir presupuestos por órdenes de P., mientras se encontraba cruzando la Av. Las Malvinas por la senda peatonal, fue embestido por un vehículo y como consecuencia de la gravedad del impacto, murió casi instantáneamente.

Tras analizar la prueba, el vocal consideró acreditada la existencia del accidente denunciado en demanda, correspondiendo determinar si ocurrió en ocasión del trabajo.

En tal sentido, se observó de una declaración testimonial prestada en autos “S., T. M. c/ O., C. G. y otros- Ordinario- Daños y Perj- Accidentes de Tránsito” que el deponente “conoce al accidentado como cliente regular de Central Rodamientos y que compraba en nombre del señor P.”.

De esta manera, el juez concluyó que “luce prístino que el vínculo contractual hizo su aporte al colocar al Sr. R., en su carácter de dependiente del Sr. P. en el espacio y el momento del siniestro y que como derivación del mismo acaeció su muerte; por lo que se concluye que el fallecimiento de R. ocurrió en ocasión del trabajo. Procedencia de los rubros reclamados con fundamento en la Ley de Contrato de Trabajo y ley de trabajo agrario 26727”.

El vocal sostuvo que la muerte de R. ha producido el devengamiento de la indemnización que por fallecimiento regula el artículo 248 LCT, ordenando, de acuerdo al artículo 53, inciso c) ,de la ley 24241, que menciona precisamente la conviviente del fallecido como beneficiaria y habiendo la actora, acreditado el vínculo resulta acreedora del crédito en cuestión.

Finalmente, se analizó que al momento del fallecimiento, el empleador contaba con contrato de afiliación vigente con SMG ART SA, no encontrándose el trabajador fallecido dentro de la nómina .

Sin perjuicio de ello, se advirtió que el artículo 28, inciso 2 de la ley 24557 dispone que “si el empleador omitiera declarar su obligación de pago o la contratación de un trabajador, la ART otorgará las prestaciones y podrá repetir del empleador el costo de estas, de ahí y en base a lo dispuesto en la norma transcripta, en el fallo se resolvió que corresponde condenar a SMG ART SA al pago de las prestaciones con fundamento en el sistema de riesgos del Trabajo por los rubros: prestación dineraria establecida en el artículo 18 apartado 1 por remisión del artículo 15 apartado 2, segundo párrafo; prestación adicional de pago único contemplada en el artículo 11, inciso 4, apartado c) ambas de la ley 24557 y la indemnización prevista en el artículo 3 de la ley 26773.