Ordenan daños punitivo y moral y reemplazo del automóvil

La automotriz y la concesionaria vendieron un 0 Km con desperfectos en el aire acondicionado. El problema nunca fue resuelto. El fallo concluyó que hubo un trato indigno a la consumidora y advirtieron de que las demandadas tienen varias denuncias por hechos similares

La Justicia de Córdoba ordenó reemplazar un vehículo y condenar por daños punitivo y moral a la empresa FCA Automobiles Argentina SA y a la concesionaria Motcor por vender un automóvil 0 Km con un desperfecto en el aire acondicionado .

El vehículo fue comprado hace siete años y, pese a los constantes reclamos de la demandante, el inconveniente nunca fue resuelto . Según se comprobó en la causa, el automóvil Fiat Palio ingresó tres veces al taller para su reparación , siempre con el mismo defecto en el funcionamiento del aire acondicionado. Luego, frente a la negativa de reparación, la mujer recurrió ante la Dirección General de Defensa del Consumidor y, finalmente, ante la falta de respuestas, interpuso un reclamo judicial .

Al resolver, el juez de 1ª Instancia Civil y Comercial, Miguel Angel Conti Martínez, hizo lugar al pedido de daño punitivo y fijó por ese concepto la suma de $200 mil, y $50 mil por daño extrapatrimonial, más los intereses .

El magistrado concluyó que existió por parte de las empresas un trato indigno a la consumidora, “a quien han obligado a realizar una multiplicidad de reclamos, sin brindar las accionadas una respuesta a ellos, sino más bien empeorar su situación”.

La resolución rechazó el planteo de inconstitucionalidad del artículo 52 bis de la Ley de Defensa del Consumido r (LDC) 24240, planteado por las demandadas.

“ Estos daños punitivos , que rompen con la estructura tradicional jurídica de daño sufrido, vienen a dar respuesta a una clara situación de injusticia que existía en nuestro país, como era la creciente violación de los derechos del consumido r por los proveedores, pues resultaban en muchos casos económicamente poco costosas las indemnizaciones por violaciones de la ley, lo que hacía que los proveedores prefirieran seguir adelante con su práctica antijurídica, por ser mayor la ganancia que la pérdida por indemnizaciones abonadas”, expresó el fallo.

Como prueba indiciaria , el magistrado destacó q ue las demandadas tienen otras causas similares en la Justicia y oficios diligenciados por la Dirección de Defensa del Consumidor informando los reclamos iniciados por los consumidores .

Respecto del caso en cuestión, Conti Martínez puntualizó que de la prueba colectada se pudo concluir que existió “ desidia y apatía de las demandadas respecto de sus obligaciones , que denotan –teniendo en cuenta la profesionalidad del proveedor— la existencia de culpa grave y tornan procedente la aplicación de una multa civil, calificada como daño punitivo , a fin de que, por aplicación de la misma, en el futuro depongan su actitud respecto de este y otros consumidores potenciales , cumpliendo adecuadamente con sus obligaciones legales como proveedores de bienes y/o servicios”.

Respecto del monto a imponer en concepto de daño punitivo, el magistrado opinó que su determinación “no debe estar sujeta a fórmulas matemáticas como las que se propone n” sino que tienen que ir de la mano de su función “preventiva”.

“Ponderando el tipo de infracción de que se trata, los perjuicios ocasionados a la consumidora, la cuantía de los beneficios económicos percibidos por la empresa y la manera en que la infracción puede impactar en la sociedad generando otros riesgos o perjuicios, se estima prudente el monto reclamado de pesos doscientos mil ($200.000)”, subrayó.

Daño moral

En cuanto al daño moral, el juez sostuvo que la existencia del daño moral se tiene por probada por el solo hecho de la acción antijurídica y por la titularidad del accionante . En ese marco, concluyó que “l a repercusión disvaliosa espiritual y anímica del incumplimiento contractual, que en el caso terminó por privar a la consumidora del bien adquirido, merece ser indemnizada a título de daño moral ”, concepto por el cual fijó un monto de 50 mil pesos más intereses.