La segunda semana del juicio que se le sigue a la ex enfermera del Hospital Neonatal Ramón Carrillo de Córdoba, Brenda Agüero, acusada de envenenar a más de una decena de bebés recién nacidos, la mitad de los cuales murió, y a otros diez ex funcionarios señalados como las personas que encubrieron los hechos, inició con un testimonio muy fuerte este lunes, en el que una madre señaló claramente la presencia de Agüero en el lugar y el momento inmediatamente previos a la muerte de su niña.
El testimonio de Yoselin Rojas, la mamá de Angeline, una pequeña que había nacido sana y con 3,6 kilogramos y poco tiempo después murió de modo sorpresivo, fue desgarrador y así lo dejaron ver las reacciones del público presente al momento de que la Cámara Séptima del Crimen la convocó a prestar testimonio en el juicio oral.
“Mi hija fue envenenada con potasio. Ella iba a ser una ángel. No se merecía morir así”, dijo Yoselin, quien si bien no culpabilizó directamente a la enfermera Agüero, brindó claros detalles sobre la presencia y la acción directa de la agente de salud en el lugar de los hechos y en los momentos previos a la muerte de la bebé.
Dijo que la acusada recibió a la bebé recién nacida, se la llevó de la habitación de parto durante unos cinco minutos, luego volvió con ella, la mantuvo con sí de espaldas mientras ella se encontraba frente a una mesa con instrumentos parecían quirúrgicos o de intervención médica y luego entregó la criatura a su padre, presente en la habitación. Al momento que lo hacía, describió Yoselin, pellizcó a la bebé en un muslo.
Casi de inmediato, comenzaron las convulsiones de Angeline que provocaron posteriormente su muerte, momentos en que la enfermera se mantuvo en la habitación con una mirada extraña, como si mirara la escena de reojo, a diferencia del resto del personal que se sorprendía de la reacción de Angeline.
Tal fue el relato de hechos realizado por la mamá de la primera bebé cuya muerte fue judicializada, hecho ocurrido el 6 de junio de 2022 y que desencadenó a la postre una intensa investigación jurisdiccional y el actual juicio. Se trató de un testimonio clave que ubicó a la acusada en el centro mismo del suceso con claras sospechas de acción criminal.
Incluso ante una pregunta del fiscal Sergio Ruiz Moreno, confirmó que solo Brenda Agüero además de su pareja y ella tomaron contacto con la beba en la sala de recuperación, antes de que hiciera el shock.
Angeline fue la primera bebé a la que se le realizó una autopsia forense, junto a otros análisis que indicaron la presencia de potasio en la sangre, en una dosis de consecuencias mortales. Su muerte acaeció en el primero de dos días de aquel oscuro mes de junio del año 2022, el 6 y el 7, en el que fallecieron dos bebés y otros presentan convulsiones graves aunque salvan sus vidas de milagro.
David Dib, el médico forense que se encargó de la autopsia, señaló hiperpotasemia como causa de la muerte, de lo cual se deducía de aplicación intencional. La médica de guardia se había negado a firmar el certificado de defunción y se le solicitó a los padres su aval para realizar la autopsia, que develó un crimen atroz.
El testimonio que siguió al de Yoselin fue el del papá de Angeline Rojas, Jaime Cornelio Pérez, quien también ubicó a Brenda Agüero, a quien señaló con el dedo en la sala, en el centro de la escena de la muerte de su hija: fue quien le retiró la bebé que tenía en brazos justo antes de que se descompusiera y luego falleciera por colapso posnatal.
Mientras prestaba esta declaración, la enfermera Agüero miraba fijamente al testigo, sin mostrar expresión alguna.
De este modo, la quinta audiencia de un juicio que será largo, que tenía previsión de cierre para junio próximo pero que a cada audiencia va sumando testigos, lo que motivó que la presidenta del Tribunal solicitara a las partes moderación en la incorporación de testimonios, finalizó cerca de las 14,30 de este lunes con pormenores que comprometen a la principal acusada, en tanto que no arrojó mayores contribuciones sobre la acción de los otros acusados, los funcionarios públicos.
¿Y los funcionarios?
Sólo un detalle compromete a las autoridades del hospital, de acuerdo al testimonio de los familiares de Angeline. En el Neonatal dijeron a la familia que la muerte de la bebé por hiperpotasemia “era rarísima, nunca había pasado un hecho como este”, cuando de acuerdo a la acusación del fiscal en la elevación a juicio, las autoridades ya conocían casos similares, previos al de Angeline, quizás no con potasio pero sí de una génesis similar, esto es el envenenamiento con sustancias de uso hospitalario.
No obstante, no hubo planteos de las defensas. En la jornada el Tribunal excusó a uno de los jurados de continuar en el proceso, al presentar un certificado médico que impedía su presencia, lo cual lo imposibilita de seguir en el juicio. La obligación es de presencialidad en todas las audiencias.
Hubo otros planteos menores en la apertura de la audiencia, ya que se pidió que se sumen más testigos. Entre ellos, Leandro Luna, pareja de Damaris Bustamante. También el de Luciana Bustamante, hermana de Damaris, más otro testigo más. Hubo también una queja de Gustavo Nievas, abogado de Brenda Agüero, sobre las preguntas de los abogados defensores que no buscan el esclarecimiento de los hechos sino la sensibilización del público y de los miembros del jurado.
“Los sentimientos no son prueba”
“Quiero diferenciar claramente lo que es el sentimiento de una mamá, de la prueba científica dentro de un expediente. No van de la mano. No va a ser el testimonio de una madre el que termine la causa eficiente de la muerte de su bebé, porque para eso el Ministerio Público Fiscal cuenta con una enorme cantidad de formas de probarlo. Es muy importante diferenciar esto”, señaló Nievas.
“Veremos qué dicen otras madres que van a declarar. Nosotros vamos a ser muy respetuosos con eso. Vamos a hacer un mínimo de preguntas, pero la investigación penal preparatoria y toda la investigación tiene una multiplicidad de pruebas, para probar distintos puntos, donde la declaración de las madres es una más”, precisó el abogado defensor, antes de quejarse de la acción de letrados de la querella, “como el Dr. Nayi, que preguntan qué color de ojos tenía la bebé”.
“Voy a objetar preguntas que no tienen nada que ver con lo que se está investigando: acá se está investigando los ocho hechos que ocurrieron con la supuesta participación de mi defendida”. No es un circo para el público, fueron palabras más palabras menos el pedido del representante legal de Brenda Agüero.