Se negó a declarar. Su abogado habló de “caso paradigmático de violación del Estado de derecho”. El ex ministro está procesado por defraudación a la Administración pública y administración fradulenta, entre varios otros cargos
El ex ministro de Planificación federal, Julio de Vido, quedó detenido ayer luego de que la Cámara de Diputados aprobó su desafuero por 176 votos afirmativos, ninguno negativo y una abstención.
El ex funcionario se presentó en el cuarto piso de los tribunales de Comodoro Py, acompañado por su abogado, Maximiliano Rusconi. Minutos antes de su presentación, Gendarmería había montado varios operativos para detener al diputado nacional.
En el cuarto piso de los tribunales, el ex ministro de Planificación de las administraciones Kirchner aguardó en una sala contigua antes de ser llamado por el juez Luis Rodríguez. De Vido se negó a declarar y presentó un escrito. Cumplidos los trámites de rigor, fue trasladado a la cárcel de Ezeiza, donde pasará al menos 48 horas. Está previsto que en el hospital de dicha unidad penitenciaria le hagan un examen médico completo y que luego se decida si va al penal de Marcos Paz o si permanece en el de Ezeiza.
A la salida de tribunales, Rusconi calificó como un “caso paradigmático de violación del Estado de derecho” el desafuero y posterior detención del ex funcionario kirchnerista, a quien consideró víctima de “una decisión política”.
Cabe recordar que De Vido afronta dos pedidos de prisión preventiva. El juez Claudio Bonadio lo acusa de presuntos sobreprecios por casi 7.000 millones de dólares en la compra de gas licuado. Por su parte, el juez federal Rodríguez lo investiga por un desvío de 270 millones de pesos en obras que no se completaron en la mina de carbón de Río Turbio. Ambos magistrados consideran que, de continuar en libertad, el ex ministro puede entorpecer las investigaciones en curso y por ello solicitaron su detención.
El desafuero
El desafuero de De Vido se resolvió pasadas las 14,15 de ayer. El Frente para la Victoria (FpV)-PJ decidió de manera orgánica no bajar al recinto, pero la situación generó diferencias internas y cuatro diputados ocuparon sus bancas en la sesión especial: Miriam Gallardo (Tucumán), Ana Llanos (Chubut), Alberto Tovares (San Juan) y María Emilia Soria (Río Negro), quienes no dieron quórum en el debate pero se sentaron en sus bancas luego de que se inició la sesión. También la diputada del FpV María Eugenia Soria acompañó la quita de fueros al exministro de Planificación Federal y votó de manera afirmativa. Al tomar la palabra durante la sesión, el diputado Pablo Tonelli (PRO) aseguró que los jueces Rodríguez y Bonadio pidieron el desafuero de De Vido porque “es indispensable” que vaya a prisión para evitar que “obstaculice” las investigaciones sobre las causas Río Turbio y gas licuado.
El presidente de la Comisión de Asuntos Constitucionales señaló que la Justicia podrá “avanzar sin quitarles las inmunidades al legislador hasta su condena”, pero en este caso los magistrados consideraron que “puede haber maniobras” para que se avance en estas causas.
“Los fueros deben existir para proteger la tarea parlamentaria pero no para eludir la acción de la justicia”, expresó el legislador macrista.
A su turno y al cierre de la sesión, que estuvo a cargo del jefe del interbloque de Cambiemos, el radical Mario Negri, aseguró que “hemos vuelto a ubicar el sentido de los fueros en el verdadero concepto que la Constitución les dio”, para “alejarlo” de la “idea” de que se trata de un “privilegio”.
Poco antes de que comenzara la sesión, De Vido había presentado un nuevo recurso para solicitar la eximición de prisión ante la Cámara Federal, que también fue rechazado.
Cabe destacar que son cinco los procesamientos que pesan sobre el ex funcionario, y una seguidilla de denuncias fueron creciendo en los últimos dos años. La compra de trenes “chatarra”, la tragedia de Once, la entrega irregular de subsidios a colectivos y la renegociación de contratos ferroviarios son algunas de las causas que lo involucran.