ESCUCHARPara el ex presidente del Colegio de Abogados de Córdoba, hay varios cambios que deben ponerse en marcha en ese organismo. Entre los planteos, modificaciones en los concursos y un jurado de enjuiciamiento en el que pueda intervenir la abogacía. Silvina Bazterrechea – [email protected]
El 24 de junio último, el Consejo de la Magistratura de Córdoba renovó sus miembros y desde agosto -cuando sean proclamados- comenzarán a trabajar en el organismo de selección de magistrados que preside el vocal del Tribunal Superior de Justicia (TSJ) de Córdoba, Luis Rubio.
El estamento de abogados de la 1ª Circunscripción quedó en manos del ex presidente del Colegio de Abogados, Alejandro Tejerina, quien encabezó la lista “Acción Profesional”.
Luego de la jura y antes de ser proclamado como consejero titular, el letrado cordobés dialogó con Comercio y Justicia.
– ¿Qué lo llevó a presentarse para trabajar en el Consejo de la Magistratura en representación de los abogados?
– Cuando uno trabaja para la abogacía organizada intenta hacerlo de distintas maneras. Fui el presidente del Colegio de Abogados, lo hice con mucho orgullo, creo que los abogados quedaron conformes y cumplí una etapa. Ocurrió ahora que personas de diferentes espacios me pidieron que yo sea quien represente y encabece una lista en Consejo de la Magistratura. Éste es otro rol que debe ocupar la abogacía en defensa de los intereses no sólo de los abogados sino de la ciudadanía, que es lo más importante.
– ¿Como consejero piensa en la posibilidad de proponer cambios en el cuerpo para mejorar su funcionamiento? ¿Qué opinión le merece este organismo?
– Siempre hay cosas que pueden mejorarse. El Consejo de la Magistratura de la Nación -por ejemplo- tiene cosas muy positivas pese a que no se logró el equilibrio pretendido en su conformación. Hay cosas que se podrían imitar en Córdoba, como la rotación de la presidencia del cuerpo; este aspecto me parece que es muy importante. Otro de los temas es el Jurado de Enjuiciamiento, hoy está demostrado por lo que está pasando en Argentina que lo importante no es sólo la selección de los jueces sino también que funcione un organismo de enjuiciamiento en el que los abogados tengamos participación como la tenemos en el Consejo de la Magistratura de la Nación.
– Usted lo piensa como una estructura que funcione dentro del Consejo de la Magistratura o simplemente que los abogados puedan participar dentro de la actual estructura del Jurado de Enjuiciamiento en la Legislatura Unicameral?
– Puede hacerse de las dos maneras, son dos alternativas. Obviamente que para esto habría que pensar en una reforma constitucional. Pero hay otra cosa fundamental, el gobernador de la provincia renunció a la elección de la terna que resulta tras un concurso, creo que eso ya no tiene que ser una cuestión voluntaria sino que tiene que ser introducido en una reforma.
– Y con respecto a la selección, ¿qué valoración hace sobre los concursos?
-Yo creo que deberíamos sentarnos a pensar en una reforma, ver qué valoración se le asigna a cada etapa del concurso. Los puntajes de calificación deberíamos verlos con un estudio más profundo.
Hay muchas valoraciones que si bien son objetivas podrían ajustarse mejor. Otro tema que veo con preocupación es la remuneración a los consejeros. La selección de los jueces es un trabajo arduo, son muchos los exámenes que se toman a los candidatos, todos los que integran el organismo con excepción del estamento de los abogados, tienen su sueldo; los abogados no. Entonces debería pensarse en una retribución para los letrados porque para dedicarse deben restar tiempo al ejercicio profesional.
Aclaro que no es mi interés cobrar para estar en el Consejo de la Magistratura pero sí me interesaría que se modifique para los consejeros que vienen.
– ¿Cree que hay voluntad para introducir estos cambios?
– Nosotros todavía no lo hemos planteado. Yo creo que todos los integrantes del Consejo son gente de mucha experiencia, el presidente Luis Rubio es una persona de gran experiencia y creo que va a haber voluntad para sentarse a dialogar y pensar en una reforma. Por supuesto, éstos son pensamientos que tenemos desde la abogacía, lo que no significa que sean correctos. Seguramente luego de un debate podrán surgir mejores ideas.
– ¿Qué opinión le merece la decisión que tomó el Consejo de la Magistratura de la Nación de auditar a los jueces federales penales de la Nación?
– Yo soy vicepresidente de la FACA y apoyamos este pedido. Hay que apoyar el Consejo de la Magistratura de la Nación que -a diferencia del de Córdoba que tiene la facultad de investigar y de destituir- hay que investigar de manera profunda y seriamente. No investigar para que eso luego quede dentro de un escritorio y que sirva para presionar a un juez para que avance o no en determinadas causas. Las investigaciones tienen que ser serias, sino es un blef y una mentira.
– De las declaraciones de Piedecasas surge que esto será un relevamiento y no una investigación que luego derive en un juicio político a un magistrado por mal desempeño. ¿Cree entonces que luego de esta auditoría puede surgir un pedido de juicio politico a un juez que no investigó o puede irse más alla de un simple relevamiento?
– Creo que es importante que salga a la luz y cuando las cosas salen a la luz ya es un avance. Cuando se hace público que una causa lleva diez años durmiendo en un cajón creo que ya es un gran avance. Entiendo la posición de Piedecasas porque obviamente el Consejo no puede introducirse dentro de cada causa porqueeso sería una cosa de locos. Pero que se haga público, ya es mucho. Lo que la sociedad está pidiendo y también ha pedido la abogacía es que se dé a conocer qué pasa dentro del Poder Judicial con las causas de corrupción.
