El abogado defensor de Leonardo Cositorto y Maximiliano Batista anticipó que recurrirá en casación ante el Tribunal Superior de Justicia la ratificación del pedido de elevación de la causa Generación Zoe a juicio, realizada por la Cámara de Río Tercero.
La defensa argumenta que no han existido garantías de imparcialidad en el proceso. En primer lugar, señalan que la fiscal de Segundo Turno de Villa María, Juliana Companys, quien lleva la causa, fue denunciada por la defensa de los imputados y se inició una investigación jurisdiccional por su actuación en el caso.
Además, mencionan que la fiscal participó en el documental de Netflix “El vendedor de ilusiones”, en el que se recrea parte del caso con varios testimonios y segmentos ficcionalizados, el que, según la defensa, violó el secreto de sumario y mostró “una marcada subjetividad”.
Asimismo, la defensa cuestiona la “rapidez” con la que el juez de control, Arturo Ferreyra, ratificó el requerimiento de elevación a juicio, alegando que tuvo “solo cinco días para revisar una causa de más de 70 cuerpos”.
También señalan que el vocal José Argüello, quien confirmó la elevación a juicio, mostró “falta de imparcialidad al apoyar públicamente a la fiscal.