En Estados Unidos, la Suprema Corte denegó una solicitud de emergencia de los proveedores de servicios de aborto para bloquear la nueva legislación que dictó Texas, una de las más restrictivas del país para levar a cabo la interrupción legal del embarazo.
La norma que entró en vigor el miércoles prohíbe el aborto después de que se puede detectar un latido fetal, algo que generalmente ocurre alrededor de la sexta semana de embarazo.
Esta semana, casi en simultáneo, el conservador estado de Texas aprobó dos leyes polémicas: la que restringe facilidades para votar y la relativa al aborto.
Restricciones similares fueron aprobadas por las legislaturas locales de todos los Estados dominados por el Partido Republicano, pero ésta es la primera vez que la Justicia determina que las iniciativas son legales y pueden entrar en vigencia.
El año 2021 es el más hostil desde que el procedimiento fue legalizado a escala nacional, en 1973, con la famosa resolución de la Corte Suprema de “Roe versus Wade”.
El presidente Joe Biden dijo en un comunicado que la nueva ley contra el aborto “viola descaradamente” la Constitución.
La manda faculta a cualquier ciudadano a demandar a una institución o médico que practique el aborto por infringir la ley, lo que podría generar una lluvia de acciones de los detractores de esa práctica.
Quienes se oponen a la medida indican que impedirá a la mayoría de las mujeres de Texas (85%) acceder a la atención médica para un aborto.
Las principales organizaciones por los derechos reproductivos advirtieron de que el movimiento antiabortista estadounidense se radicalizó considerablemente.
Desde que Donald Trump dejó la presidencia, las legislaturas se volcaron al tema aborto y 2021 es año más hostil desde que el procedimiento fue legalizado a escala nacional, en 1973, con la famosa resolución de la Corte Suprema de “Roe versus Wade”.
Los Estados promulgaron 90 restricciones al aborto en 2021, superando el récord anterior de 89, en 2011.