El juez federal Sebastián Casanello se declaró incompetente para seguir investigando la causa sobre las reuniones en la quinta de Olivos y envió el expediente a la Justicia federal de San Isidro, que tiene jurisdicción territorial sobre la residencia.
Por lo pronto, la pesquisa quedó a cargo del magistrado de turno, Lino Mirabelli.
Casanello se expidió sobre la competencia sin planteos previos de ningún integrante de la Justicia Federal de San Isidro para reclamar las actuaciones.
El único pedido que emanó desde allí lo hizo la jueza Sandra Arroyo Salgado, quien solicitó acceder al expediente porque tenía una denuncia similar.
La Cámara Federal de San Martín debate si el magistrado compete es Mirabelli o Arroyo Salgado, que estaba de turno cuando se presentó la primera denuncia por la denominada “Fiesta de Olivos”.