ESCUCHAR«La Asociación Internacional de Mujeres Juezas (IAWJ) tiene graves temores por los derechos humanos básicos de las mujeres y las niñas en Afganistán a medida que los talibanes avanzan y toman el control de grandes partes del país. Esto incluye el derecho de las mujeres a vivir y trabajar en condiciones de seguridad», inicia la declaración de la organización que conduce la jueza Susan Glazebrook.
Como organización integrada por más de 6500 juezas de más de 100 países y territorios de todo el mundo, «queremos llamar la atención en particular a la situación de las juezas afganas, dado el papel especial que han desempeñado y siguen desempeñando en la defensa del estado de derecho y los derechos humanos para todos, y los peligros particulares que enfrentan como resultado de ello. Honramos su compromiso y su valentía», continúa el documento que cuenta con el apoyo de la Asociación de Mujeres Jueces de la Argentina (AMJA) dirigida por la vocal del Tribunal Superior de Justicia de Córdoba, Aída Tarditti.
Desde 2003, la IAWJ ha estado apoyando a las juezas de Afganistán en su trabajo. En la actualidad, unas 270 mujeres ejercen como jueces allí. Más de 100 de estas mujeres juezas son miembros de la Asociación de Mujeres Juezas Afganas (AWJA), que está afiliada a la IAWJ. Algunos miembros de la junta directiva de la IAWJ hablaron con varias juezas afganas en julio pasado en una reunión virtual de la AWJA.
«Las juezas presentes en la reunión enviaron un mensaje urgente y crítico a sus colegas internacionales. Hablaron de las peligrosas y difíciles condiciones en las que viven y trabajan. Algunas juezas han perdido la vida en ataques terroristas y varias de las juezas presentes habían recibido amenazas. Las juezas declararon que aman a su país y no desean irse. Simplemente piden que se les permita continuar su labor vital en los tribunales de su país en condiciones de seguridad», detalla el documento.
IAWJ ha recibido numerosos mensajes de juezas que describen el deterioro de la situación. Algunas ya se han visto obligadas a huir de sus puestos en las provincias con sus familias porque era demasiado peligroso permanecer.
Por ello, pidió a los involucrados en cualquier negociación de paz a que se garanticen y se salvaguarden los derechos de las mujeres y las niñas. Sin embargo, la organización que nuclea a las juezas del mundo sigue muy preocupada por el hecho de que, debido a la naturaleza de su labor y a las sentencias anteriores que han dictado en tribunales penales, de anticorrupción y de familia, muchas de las juezas y sus familias corran un peligro especial si los talibanes llegan a Kabul. Estos peligros se ven exacerbados por su género y la probabilidad de que las personas a las que han condenado sean excarceladas.
Situación desesperante y precaria
«La IAWJ insta a los gobiernos a que incluyan a las juezas afganas y a sus familias, que se encuentran en una situación tan desesperada y precaria, en las medidas especiales que se extienden a los intérpretes, periodistas y otro personal que prestó servicios esenciales a las fuerzas militares extranjeras en Afganistán. Al servir como jueces y ayudar a desarrollar el poder judicial afgano, las juezas han ayudado a establecer el estado de derecho en su país, un pilar esencial de un Estado democrático. Permitir que estén a merced de los talibanes y de los grupos insurgentes, dado lo que han sacrificado, sería realmente trágico», concluye enfático el pedido internacional.
Cabe recordar que en enero pasado, dos juezas de la Corte Suprema del país fueron asesinadas en la ciudad de Kabul.
En Argentina, AMJA promueve un petitorio internacional por la seguridad de las mujeres afganas.
Por la Seguridad de las mujeres!!!