Interpretan el régimen aplicable a una trabajadora doméstica

El Tribunal Superior de Justicia de Córdoba admitió el recurso de casación de la parte actora y ordenó la indemnización de acuerdo con la norma que regía al momento de finalizar la relación laboral [privado]

Al interpretar que con la sanción de la ley de los trabajadores de casa particulares, Nº 26844, esa norma repercutió en sus efectos jurídicos en las relaciones jurídicas preexistentes a su dictado, la Sala Laboral del Tribunal Superior de Justicia de Córdoba (TSJ) admitió una casación presentada por la parte actora y ordenó que se le abone la indemnización conforme a lo dispuesto por dicha normativa, contándose toda la antigüedad de la accionante conformada por nueve períodos.

Liliana Barrionuevo se agravió de la conclusión del a quo, que entendió que la relación preexistente a la entrada en vigencia de la ley N° 26844 no fue laboral y aplicó erróneamente el artículo 1 del decreto N° 326/56, al darle un alcance mayor al que tiene.

Detalles

A su turno, el Alto Cuerpo integrado por los vocales María de las Mercedes Blanc de Arabel, Luis Enrique Rubio y Luís Eugenio Angulo, indicó que el juzgador consideró demostrado que las partes estuvieron vinculadas en relación de servicio doméstico desde febrero/06 hasta julio/ 14, pero, como no se acreditó que en el período -febrero/06 a abril/13-, fecha esta última en la que se la registró, hubiera cumplido con los requisitos del antiguo estatuto, dicho lapso no lo tuvo en cuenta a los fines indemnizatorios.

De ese modo, el a quo descartó la posible aplicación del artículo 2 de la Ley de Contrato de Trabajo.

Bajo esas premisas, el TSJ consideró que se encuentra firme para la causa que la reclamante laboró para la demandada desde febrero de 2006 hasta julio de 2014, “ininterrumpidamente” como trabajadora de casas particulares.

El fallo agregó que “por la fecha de finiquito del contrato la ley que regía la relación era la número 26844, conforme la conclusión a la que arriba el a quo”, observando que ése es el ordenamiento que rige todo el periplo laboral, “según la letra del art. 3 del C.C. Velezano, hoy 7 del C.C. y C. N., en cuanto alcanza a las consecuencias y situaciones jurídicas existentes”.

Relaciones

En tal sentido, el TSJ sostuvo que “la nueva ley cuando ‘toca’ relaciones pasadas, no implica retroactividad porque únicamente afecta consecuencias de hechos y actos no acaecidos”, por lo que el efecto inmediato que se supone más justo, es constitucional.

Entonces, el Alto Cuerpo consideró que la escisión que efectúa el tribunal de una parte del vínculo, “incluso calificándola con una naturaleza extraña, luce alejada de los principios generales que gobiernan el derecho laboral” y remarcando que “si antes entendió probada permanencia y dependencia por un número considerable de años”.

En resumen, en el fallo se resolvió que “debe admitirse el recurso de casación interpuesto por la actora y, en consecuencia, condenar a la demandada a abonar a la actora una indemnización por antigüedad de febrero del año 2006 a julio de 2014 -nueve períodos”.