Inhiben bienes y embargan derechos hereditarios para garantizar cobro del crédito

Al ser insuficiente el monto de las pertenencias del demandado, el tribunal autorizó la incautación porque el demandante no tenía otra forma de asegurarse la percepción de su acreencia

Al considerar que la inhibición general de bienes del demandado resultó insuficiente para garantizar el crédito del accionante, obtenido mediante sentencia firme, la Cámara 8ª Civil y Comercial de Córdoba revocó la resolución del juez a quo y ordenó que el acreedor pueda embargar también los derechos hereditarios de l demandado, al no resultar plenamente incompatibles ambas cautelares, de acuerdo con las constancias de la causa.

El tribunal integrado por los vocales Gabriela Lor ena Eslava y Hector Hugo Liendo, al tratar la apelación, analizó que de las constancias de autos surgió que el actor, Adalberto Mario Aranda, solicitó la inhibición general de bienes del demandado Marcelo Miguel Márquez, atento a la inexistencia de bienes inmuebles a su nombre, y -luego de acreditar la inexistencia de bienes inmuebles y muebles (automotor) registrables- se ordenó la anotación de la medida por la suma de US$14.801,15.

La alzada evaluó que, tras la inhibición, Márquez inició declaratoria de herederos de su padre, por lo que Aranda solicitó que se trabe embargo de los derechos hereditarios de aquél, medida que fue rechazada por el juez de primera instancia motivando la apelación en debate.

Artículo

Ante ello, la Cámara expuso que para fundar su rechazo, el a quo argumentó que la inhibición general de bienes es subsidiaria del embargo, en los términos del artículo 481 del Código Procesal Civil y Comercial (CPCC) provincial, que expresamente dispone que en todos los casos en que habiendo lugar a embargo, éste no pudiere hacerse efectivo por no conocerse bienes del deudor, o por no cubrir éstos el importe del crédito reclamado, “podrá solicitarse contra aquél la inhibición general de disponer de sus bienes, la que se deberá dejar sin efecto siempre que presentase a embargo bienes suficientes o diere caución bastante”.

Bajo esas premisas, el fallo indicó que la cuestión objeto de discusión se asienta en considerar si pueden coexistir la medida cautelar de embargo sobre los derechos hereditarios del demandado y la inhibición general de bienes ya dispuesta con anterioridad atento la inexistencia de bienes muebles e inmuebles a nombre del demandado.

Los camaristas observaron que la norma dispone dos hipótesis al respecto -cuando se solicita un embargo preventivo y éste no puede efectivizarse por inexistencia de bienes registrables a nombre del deudor; o cuando aun existiendo, éstos resulten insuficientes para cubrir el monto del crédito que se pretende garantizar-.

Insuficiente

En ese orden de ideas, la alzada expuso que al solicitar la traba de la medida cautelar, el actor manifestó puntualmente que la misma era insuficiente para cubrir el monto del crédito y, por lo tanto, peticionó que se mantuvieran ambas medidas pese a la subsidiaridad que caracteriza a la inhibición general de bienes.

Asimismo, la decisión evaluó que en la causa se trataba un crédito con sentencia firme por una suma importante de dinero (US$14.801,15), cuyo pedido de embargo se encuentra circunscripto a los derechos hereditarios que le pudieran corresponder al demandado en la declaratoria de herederos del padre, iniciada por el acreedor.

Así, los jueces advirtieron que el proceso universal del sucesorio involucra la totalidad del patrimonio del causante, incluyendo tanto los bienes a repartir como las deudas del difunto o de los bienes.

En tal sentido, la cámara señaló que la manifestación efectuada por el actor respecto a la insuficiencia del embargo para garantizar la deuda, tiene indicios de seriedad, si se tiene en cuenta que el embargo solicitado es sobre derechos hereditarios, en una declaratoria con un único bien aparentemente, desconociéndose las deudas del causante ni la razón por la cual después de tantos años de haber fallecido el causante no se haya iniciado la sucesión, agregando que tampoco se conocen cuántos herederos pueden suceder al causante.

Indicios

Por lo expuesto, el tribunal derivó que estos indicios, sumados a la propia declaración de la parte actora, teniendo en cuenta que el deudor siempre tendrá la posibilidad de solicitar el levantamiento de las medidas cautelares, “llevan a la conclusión de que el recurso de apelación debe prosperar, ordenándose el embargo peticionado luego de los cumplimientos de los requisitos que la norma le impone”.

En esa dirección, el pronunciamiento resaltó que ello es así, por cuanto la inhibición general de bienes oportunamente dispuesta, no resulta plenamente incompatible con el embargo, si aquél resulta insuficiente.

En consecuencia, en el fallo se resolvió hacer lugar al recurso de apelación interpuesto por la parte actora, revocando el proveído cuestionado en cuanto rechaza la cautelar peticionada y ordenando se admita la misma previo cumplimentarse los trámites de ley correspondientes.