La fiscal a cargo de la causa por el crimen de la periodista Griselda Blanco, asesinada el 20 de mayo pasado en su casa de la ciudad correntina de Curuzú Cuatiá, solicitó autorización al Fiscal General de la provincia para habilitar un juicio abreviado al único imputado en el caso, informaron fuentes judiciales.
La abogada querellante en la causa por el asesinato de Blanco (44), Andrea Tribbia, dio a conocer esta noche que la fiscal de la causa, María José Barrero Sahagún, notificó a las partes sobre un pedido de autorización al Ministerio Público provincial para iniciar un acuerdo de juicio abreviado con el imputado y detenido Darío Alfredo Ricardo Holzweissig (46).
El abogado defensor, Alejandro Exequiel Gómez, negó que la actual instancia signifique que el empresario detenido haya “confesado”.
“Es una causa muy mediatizada en la que hay muchos trascendidos, por la sensibilidad del tema no puedo dar mayores precisiones, pero sí aclarar que aquí no hubo una confesión“, indicó el letrado.
Tribbia, en tanto, señaló a esta agencia que por la tarde les “llegó una notificación” en la cual la fiscal les anotició “que había solicitado autorización al fiscal General para proceder a un acuerdo de juicio abreviado pleno con el imputado a pedido de su abogado defensor”.
Al ser consultada si esa instancia implica un reconocimiento de la autoría del crimen por parte del imputado, la profesional respondió afirmativamente y cuestionó la celeridad que la representante del Ministerio Público le imprimió a la instrucción de la causa, faltando aún pruebas que encuadren el caso penalmente.
“A mi entender sí”, dijo sobre una virtual confesión por parte de Holzweissig, imputado por homicidio simple y en prisión preventiva.
En ese sentido, añadió: “Desde mi perspectiva podrán discutirlo, pero para mí claramente está admitiendo la comisión del hecho”.
Luego Tribbia sostuvo la pena en expectativa por el delito de homicidio simple sería de 8 a 10 años de prisión.
“Aún no tenemos noticias de que se hayan producido pruebas como ADN, es lo que más queremos, porque son pruebas importantes y nos molesta profundamente que no se pueda producir esa contundente cantidad de pruebas para que pueda ser llevada a juicio en los tiempos que requiera”, afirmó la abogada.
Y agregó que desean que “en virtud de esas pruebas y del hecho atribuido y comprobado se le dé una condena basada en hechos probados, demostrados y no sobre meras probabilidades o conjeturas de cualquier parte”, por lo que piden “un juicio justo”.
Asimismo, la querellante sostiene el pedido de que se agrave la carátula y que cambie a femicidio agravado por alevosía, ya que tienen “la certeza de que hubo violencia ejercida por un hombre hacia una mujer y no hay dudas de eso”.
“Ni debería considerarse el juicio abreviado, incluso para la figura que imputó la fiscal, homicidio simple, porque el juicio abreviado debe ser para causas leves y no como en este caso, un femicidio brutal, los hijos están destrozados porque no creen que ocho años sean justos”, indicó.
Luego de que se expida el fiscal general, la querella cuenta con un plazo de cinco días para apelar el dictamen ante el juez de Garantías, Martín José Vega, y solicitar que no haya un juicio abreviado.
Por su parte, luego de conocerse la novedad procesal, el colectivo Periodistas Argentinas emitió un mensaje público en el que expresó su “preocupación por la actitud de la fiscal” Barrero Sahagún, a quien le adjudicaron un “apuro por cerrar una causa sin investigación y con múltiples irregularidades”.
En tanto que fuentes del entorno de los familiares de la víctima, precisaron que el Ministerio de las Mujeres de la Nación está brindando acompañamiento y que se articularán acciones con la Secretaría de Derechos Humanos de la Nación con el fin de proceder a su presentación como querellante.
El empresario Holzweissig fue el segundo detenido por el caso luego de Armando Jara, la expareja de la víctima que en un primer momento fue apresado por femicidio y luego liberado por falta de pruebas, aunque continúa vinculado a la causa ya que la fiscalía no descarta ninguna hipótesis.
El crimen fue descubierto el 20 de mayo último, cuando Blanco fue hallada estrangulada, con una soga en el cuello, tirada en el piso, con golpes en el rostro y heridas de arma blanca en su casa de la calle Juan Pujol, de Curuzú Cuatiá.