En Suiza, una magistrada le redujo la pena a un abusador porque la violación por la que fue juzgado y responsabilizado “duró solo 11 minutos” y fue “relativamente corta”.
La sentenciante también alegó que la víctima “mandó señales” y que estaba “jugando con fuego”.
El ataque fue perpetrado por dos ciudadanos portugueses, de 17 y 32 años, contra una mujer de 33, frente a la entrada de su departamento, en la ciudad de Basilea, en febrero de 2020.
El joven aún no fue sentenciado por el tribunal de menores pero al perpetrador mayor de edad se le redujo la pena de prisión de 51 a 36 meses en la instancia de apelación.
El ataque sexual ocurrió después de que la mujer conoció a los dos hombres en un club nocturno. Según la jueza Liselotte Henz, el mayor, quien cometió la violación, solo era responsable de una “falta moderada” y ponderó que la víctima no había sufrido lesiones físicas permanentes.
Es probable que los autores sean deportados de Suiza una vez que finalicen sus sentencias.
La decisión generó indignación en el país y cientos de manifestantes concurrieron a la sede del tribunal.
La violación ocurrió después de que la mujer conoció a los dos hombres en un club nocturno. Según la jueza Liselotte Henz, el mayor, quien cometió la violación, solo era responsable de una “falta moderada”. Ponderó que la víctima no había sufrido lesiones físicas permanentes.
La decisión causó revuelo en el país, con políticos de izquierda y derecha rechazando las declaraciones de la magistrada. “Una sentencia de cuatro años ya era leve, pero ahora insinuar que la mujer tuvo complicidad debido a su comportamiento con alguien ajeno al crimen es insoportable. Qué señal para todas las víctimas de violencia sexual”, dijo al respecto Marcel Columb, de los socialdemócratas de Basilea. “¿En qué tipo de sociedad vivimos?”, preguntó -por su parte- el derechista Jeromie Repond.