La Comisión de Reforma presentó el nuevo texto, que actualiza el Código Penal de 1921. Entre las novedades, se incluyen la tipificación de delitos como el cibercrimen, el terrorismo, y la trata de personas, además de mayores penas para casos de corrupción
Tras seis meses de intenso trabajo, la Comisión de Reforma del Código Penal anunció que finalizó el anteproyecto que introduce significativos cambios a una legislación que ha sufrido más de 900 modificaciones desde su creación en 1921.
Según el ministro de Justicia, Mariano Cúneo Libarona el nuevo Código Penal tiene como objetivo proporcionar previsibilidad y seguridad jurídica. “La sociedad clama por justicia y este anteproyecto ordena un código detonado”.
El nuevo texto incorpora la protección de bienes jurídicos que no estaban contemplados anteriormente, como el orden internacional, la seguridad informática, el ambiente, el patrimonio cultural y arqueológico, y otros relacionados con el deporte. Además, aborda nuevas formas de criminalidad, como el crimen organizado, el narcotráfico global, el terrorismo y el cibercrimen, entre otros.
Definiciones
Una de las innovaciones más relevantes del nuevo Código es la introducción de definiciones precisas de ciertos términos que serán fundamentales para su aplicación. Así, términos como “funcionario público” y “empleado público” serán utilizados para designar a cualquier persona que participe, accidental o permanentemente, en el ejercicio de funciones públicas, ya sea por elección popular o por nombramiento de autoridad competente.
Otros conceptos definidos incluyen “mercadería”, que abarca todos los efectos susceptibles de venta, incluidas las divisas; “estupefacientes”, que comprende sustancias susceptibles de generar dependencia física o psíquica, y que serán actualizadas periódicamente por el Poder Ejecutivo; y “persona mayor”, que hará referencia a toda persona mayor de 60 años. Estas definiciones, junto a otras como “tortura”, “discriminación” y “explotación”, aportan claridad al marco legal, unificando criterios que hasta ahora podían generar confusión en su interpretación.
Nuevos Delitos
Entre las novedades más destacadas está la incorporación de delitos modernos que abordan problemas contemporáneos, como el cibercrimen y la trata de personas. La reforma también introduce un tercer libro en el Código Penal, dedicado a los delitos contra la humanidad, incluyendo desapariciones forzadas, genocidio y crímenes de guerra, así como delitos contra la administración de justicia de la Corte Penal Internacional.
En cuanto a los derechos de autor, se avanzó en la protección de la propiedad intelectual, pero también se determinó que bibliotecas, museos y archivos públicos o sin fines de lucro quedarán exentos de pena en relación con delitos por derechos de autor, con el objetivo de fomentar la difusión de la cultura y el conocimiento.
Corrupción
La lucha contra la corrupción es otro eje fundamental del nuevo Código Penal. El anteproyecto prevé un aumento significativo en las penas para delitos como el cohecho, el soborno y el enriquecimiento ilícito. Por ejemplo, en el caso del cohecho, las escalas penales pasarán de 1-6 años de prisión a un rango de 4-12 años. Las penas serán aún más severas cuando los delitos involucren a funcionarios de alto rango, como el presidente, gobernadores o magistrados judiciales, quienes podrían enfrentar penas de hasta 15 años de prisión.
Además, el Código incorpora el soborno entre privados, permitiendo que tanto personas físicas como jurídicas sean responsabilizadas. Asimismo, se introduce la posibilidad de decomisar bienes antes de que se dicte una condena penal, asegurando que el patrimonio ilícito no pueda ser preservado por los delincuentes.
Narcotráfico y trata
El narcotráfico es considerado en el nuevo Código Penal como una amenaza real para la seguridad pública. Las penas por tráfico de drogas se endurecen, con sanciones que pueden ir desde 4 a 25 años de prisión, dependiendo de la gravedad del delito y el rol del condenado. Además, se incrementarán las sanciones para quienes involucren a menores en la distribución de drogas.
La trata de personas, un delito que vulnera gravemente los derechos humanos, será castigada con penas severas y se incorporará un nuevo tipo penal que sancione la compraventa de menores, que hasta ahora no estaba contemplado en la legislación vigente.
Incorporación de delitos Informáticos
El acoso laboral, conocido como mobbing, también ha sido tipificado en el nuevo Código Penal. Este delito, que afecta gravemente la salud psicológica de las víctimas, será sancionado con penas de prisión de hasta dos años para aquellos que ejerzan actos de hostigamiento sistemático en el ámbito laboral.