Después de comprobar la maniobra fraudulenta efectuada por el actor junto a otra empleada – quien cortaba fiambre, lo pesaba en la balanza, extraía la etiqueta en la que constaba el peso y el precio sin pegarla aún en el envoltorio, tras lo cual continuaba agregando fetas de la mercadería que se tratara, para finalmente añadirle la citada etiqueta, y que el accionante pasaba luego por la caja donde abonaba un valor inferior al real-, la Sala 8ª de la Cámara de Trabajo de Córdoba consideró legítimo el despido con causa dispuesto por la titular del supermercado demandado perteneciente a la firma Cándido Lorenzo e Hijos SRL.
El resto del contenido sólo es accesible para usuarios suscriptos al diario. Si estás suscripto, iniciá sesión con tu usuario/e-mail y tu contraseña.
O podés enviar una solicitud de suscripción desde aquí.