El gremio de empleados judiciales de Córdoba denunció al juez Civil N° 11, Eduardo Bruera, por obligar a todas las empleadas y empleados de su juzgado a concurrir de manera presencial pese a que las dimensiones de la oficina no permiten mantener el distanciamiento social adecuado.
Según informó la Asociación Gremial de Empleados del Poder Judicial (AGEPJ), se solicitó a la Administración que ordene al magistrado que cumpla la norma sanitaria; caso contrario, se “dispondrá retención de tareas focalizada en dicho juzgado para salvaguardar la salud de las compañeras y compañeros trabajadores“.
“Es inentendible que en medio de la segunda ola, que está provocando estragos en todo el mundo, colapsando los servicios de salud, un juez de la Provincia, desde su casa, porque es persona de riesgo al tener 78 años, ordene incumplir la normativa sanitaria poniendo en grave riesgo la salud de las trabajadoras y trabajadores de su juzgado”, aseguró el secretario Adjunto de la AGEPJ, Adrián Valan