En el marco de la pesquisa por el caso de Julio “Chocolate” Rigau, el puntero peronista que fue sorprendido mientras extraía dinero de cuentas de supuestos empleados de la Legislatura de la provincia de Buenos Aires usando sus tarjetas de débito, el juez platense Guillermo Atencio ordenó detener a un total de 17 personas.
En la lista figuran el concejal platense massista Facundo Albini y su padre, Claudio Albini, quien durante años se desempeñó como subjefe en la Dirección de Personal de la Cámara de Diputados. El magistrado del caso pidió que la policía les secuestre sus celulares.
La maniobra de defraudación, superior a los 800 millones de pesos, habría comenzado en 2021, con decenas de contratos. No se descarta la participación de varios legisladores.
Atencio precisó que con el avance de la investigación podrán ser identificados los jefes de la organización delictiva.
La detención de los Albini, imputados por fraude y asociación ilícita, fue reclamada por la fiscal Betina Lacki y luego por la Fundación Poder Ciudadano.
A los 15 dueños de los plásticos que tenía “Chocolate” cuando fue detenido, el 9 de septiembre pasado, se les enrostra ser participes necesarios del delito de fraude en perjuicio de la administración pública. Se trata de Graciela Anivarro; Raul Boragina; Marisol Correa; María Cecilia D’ Ovidio; Lourdes Degollada; María Cristina Degollada; Rosana Delgado; Teodomiro Falcón Ramirez; Raul Falone; Diego Koster; Daniel Mederos; Sheila Maroni; Ricardo Sánchez; Ramón Sosa y Paula Valdata.
Además de las detenciones, Atencio ordenó la inhibición general de las cuentas bancarias vinculadas a las 49 tarjetas de débito que se le incautaron a Rigau y de la cuenta de Albini padre.
Según surge de los mensajes que se extrajeron del celular del puntero, el hombre respondía a los Albini.
El viernes pasado, Atencio dictó la prisión preventiva de Rigau, al considerar que hay riesgos procesales si queda en libertad.
La trama de corrupción por ahora sigue enfocada en Rigau, pero la Fiscalía tiene pruebas de que el entramado con fondos y contratos de la Legislatura bonaerense tiene otros protagonistas.