ESCUCHARSe presentó espontáneamente en el juzgado de Claudio Bonadio. Otros dos empresarios quedaron detenidos
El empresario Jorge «Corcho» Rodríguez declaró ayer durante casi dos horas en indagatoria ante el juez Claudio Bonadio en la causa por los cuadernos de las coimas y rechazó haber participado del circuito de dinero ilegal.
Rodríguez se presentó espontáneamente en Comodoro Py para negar cualquier vínculo con los delitos que se investigan en el expediente. Aclaró que el 17 de septiembre de 2013, fecha que Oscar Centeno lo menciona en sus anotaciones, él estaba de viaje en los Estados Unidos. Su abogado defensor anunció que presentará su pasaporte sellado, como medida de prueba.
El empresario también desmintió anotaciones de Centeno en 2013, respecto a una visita de éste y Roberto Baratta -segundo del Ministerio de Planificación- a un galpón de la calle Bernardo de Irigoyen, en Munro: según su entorno, allí no había un galpón sino una edificio con entrada peatonal, donde Rodríguez tuvo una oficina pero sólo desde 2014.
Así, frente al juez Bonadio, decidió responder las preguntas formuladas, sin dejar ningún escrito. Cuando le hicieron referencia a su relación con el ex ministro Julio de Vido, indicó: «La relación no era con él sino con su hijo, Facundo de Vido, que es músico y a quien le produje varios discos. Centeno también me conocía desde 2010 porque llevaba y traía a Facundo a ensayos y grabaciones». El imputado declaró también que no conoce a ninguno de los demás empresarios acusados «excepto a Armando Loson -de la empresa Albanesi-, y sólo socialmente».
Cabe recordar que la Justicia investiga una asociación ilícita que habrían comandado Néstor Kirchner y Cristina Fernández, que habría movido en sobornos más de 200 millones de dólares. En este marco, Rodríguez se encuentra imputado como partícipe necesario de la organización delictiva. Su abogado, Alejandro Novak, explicó que si bien no se encontraba citado a indagatoria, «al enterarse por los medios que estaba mencionado por el chofer Centeno, se presentó de forma espontánea».
En la investigación figura el nombre del empresario que es investigado en dos expedientes por el mismo delito, vinculado con obras asignadas a la constructora brasileña Odebrecht.
Más empresarios detenidos
Paralelamente, en el marco de la causa que investiga los cuadernos de las coimas, quedó detenido ayer Néstor Otero, el concesionario de la Terminal de Ómnibus de Retiro.
Otero había declarado hace dos semanas ante Bonadio y el fiscal Carlos Stornelli. En esa oportunidad, dijo que en la fecha en que aparece mencionado en los cuadernos, entregando un bolso a Nelson Lazarte, asistente de Baratta, estaba en Paraguay. Sin embargo, ante la nueva prueba que se incorporó al expediente, Bonadio ordenó su detención.
Dueño de la empresa TEBA SA, Otero tiene la concesión de la terminal de ómnibus desde hace más de 20 años y fue investigado por pagar un departamento al exsecretario de Transporte, Ricardo Jaime.
Por este mismo caso, Bonadio le tomó declaración al empresario Sergio Taselli -ex concesionario del tren Roca-, quien finalmente también quedó detenido.
Taselli aparece mencionado en los escritos de Centeno como uno de quienes en 2013 habría entregado un «bolso lleno de dinero» a Baratta.
