La letrada rubricó, usando el sello de su progenitor, un escrito en el que se desistía de una acción. Se defendió aduciendo que aquél -también profesional- tenía demasiados juicios en marcha y no tenía tiempo de hacer en persona el trámite.
La visita de la Corte Suprema a Rosario
Cada día, y de manera más fuerte, se escuchan voces que reclaman a nuestras autoridades que se ocupen de los problemas que...