ESCUCHARLos propietarios de un campo en el partido bonaerense de Zárate fueron condenados a indemnizar a un vecino por los daños y perjuicios causados por una fumigación.
La Cámara Nacional de Apelaciones en lo Civil determinó que la conducta de los demandados provocó la contaminación del cultivo de frutos en terrenos próximos. El hecho sucedió en 2002 y los daños los sufrió un establecimiento donde había 14 hectáreas plantadas con arándanos.
Los accionados mandaron a fumigar su terreno con un herbicida selectivo para el control de malezas de hoja ancha y, según las pericias, tanto el agente como sus emanaciones pueden ser perjudiciales para arándanos, rosas, pinos y durazneros.
“El propietario de un fundo no debe desarrollar actividades que invadan a los vecinos” y, en los casos que aquélla resulte inevitable, “el afectado tiene derecho a ser indemnizado”, sostuvo el tribunal. Asimismo, aclaró que no tenía importancia que el herbicida fuera de venta libre, porque ello no implica que quien lo utiliza lo haga de cualquier modo, acotando que “cualquier aerosol mata insectos es de venta libre, pero ello no significa que en su uso no deban tomarse precauciones”.
