Se realizó en Colombia la audiencia de imputación de cargos a Nicolás Petro Burgos, hijo del presidente Gustavo Petro, y a su ex esposa, Daysuris Vásquez.
Al finalizar el acto, el fiscal delegado ante el Tribunal Superior de Bogotá, Mario Burgos, anunció que Petro Burgos y Vásquez quedaron imputados en función de la prueba e información obtenidos en la pesquisa que los involucra.
La Fiscalía señala al hijo mayor de Petro como autor de lavado de activos y enriquecimiento ilícito.
En tanto, a su ex pareja le enrostra el primer delito y violación de datos personales.
Petro Burgos, diputado de la Asamblea del departamento del Atlántico, fue detenido junto a Vásquez el pasado sábado en un operativo policial realizado en Barranquilla.
El fiscal delegado informó que poco más de 250.000 dólares del encausado serían producto de un incremento patrimonial injustificado, generado por “ingresos clandestinos de diner, desde 2021 hasta finales de 2022”.
La investigación se inició cuando Vásquez denunció a su ex, aportando conversaciones e información que guardaba en su teléfono celular.
Aseveró que Petro Burgos habría recibido unos 100.000 dólares de Samuel Santander Lopesierra Gutiérrez, conocido como “El hombre Marlboro”, quien fue extraditado en 2003 de Colombia a EEUU, que lo requería por tráfico de cocaína, y que actualmente es candidato a la Alcaldía de Maicao (La Guajira).
Según la mujer, Petro Burgos embolsó además otros 100.000 dólares de otra persona y afirmó que ella guardó el dinero en valijas y en una caja fuerte. Dijo que, inicialmente, estaba destinado a la campaña presidencial de su ex suegro, pero que nunca llegó a entregarse.
En esa línea, sostuvo que los recursos serían utilizados para la compra de una mansión que costaba unos 400.000 dólares en una exclusiva zona de Barranquilla, por la que ya se habían abonado aproximadamente 178.000 dólares.
La ahora imputada declaró también que su ex también habría recibido más dinero y una costosa camioneta que destinó a su esquema de seguridad.
La Fiscalía considera que Petro Burgos tuvo un incremento de patrimonio injustificado puesto que su ingreso mensual debía ser de unos 3.000 dólares como diputado departamental y se comprobó que en realidad percibía unos 50.000 dólares mensuales cuyo origen se desconoce.