ESCUCHARLa Sala II de la Cámara de Casación Penal bonaerense determinó que Nicolás Pachelo mató a María Marta García Belsunce y lo condenó a prisión perpetua.
Lo hizo al revertir la absolución del ex vecino de la víctima, dictada por el voto en mayoría del Tribunal Oral en lo Criminal N° 4 de San Isidro, en 2022.
La máxima instancia en lo criminal de la provincia de Buenos Aires sentenció a 21 años y cinco meses del asesinato de la socióloga y estableció que Pachelo fue quien, el 27 de octubre del 2002, ingresó a la casa del matrimonio García Belsunce-Carrascosa, ubicada en el country Carmel, con intención de robarles, y le quitó la vida a la mujer con cinco disparos en su cabeza.
En 2022, Pachelo fue juzgado por el homicidio, pero solo fue condenado por robos en countries y quedó alojado en el penal de Gorina.
La Fiscalía recurrió lo decidido. “El asesinato perfecto fue hasta ahora el olvido. Han vuelto el mundo un poco peor. A su parecer preconcebido, a María Marta García Belsunce no la mató nadie o, lo que es peor, fue un plan orquestado por su familia, ya absuelta de culpa y cargo. Estaban, y están aquí, en juego cuestiones de institucionalidad”, sostuvo sobre el voto de los jueces que inclinaron la balanza a favor de la absolución de Pachelo, y tildó al fallo de arbitrario y “preconcebido”.
Los jueces de Casación basaron su decisorio en las pruebas que presentaron los fiscales de San Isidro en el juicio, muchas de las cuales estuvieron desde el primer momento en el expediente.
Una de las más importantes fue la localización de Pachelo antes y después del crimen, en base a los impactos de la señal de su celular en distintas antenas.
Desde que la investigación determinó que fue García Belsunce fue asesinada, Pachelo sostuvo una coartada. Dijo que aquel día salió del Carmel cerca de las 17.30, una hora antes del horario de la muerte de la víctima, que pasó a buscar a su madre por su departamento en Recoleta y que fueron juntos al Paseo Alcorta a comprar un juguete para su hijo.
Esto lo sostuvo también en el debate de finales del 2022. Para sustentar esa versión, la defensa mostró desde un comienzo el ticket de la juguetería, que reflejó las 19.40 como el horario de la supuesta transacción.
No obstante, el equipo de fiscales rebatió su relato con un documento que muestra que Pachelo llamó a su madre, Silvia Ryan, ese día, a las 19, y que la celda que tomó la comunicación (la 394) está ubicada en el partido de Pilar.
Si bien se desconoce el contenido del diálogo, los fiscales plantearon que el acusado le pidió a Ryan que fuera a comprar el juguete con la intención de armar su coartada.
También probaron que a las 19.32, el ahora condenado recibió una llamada que nuevamente volvió a impactar en la celda 394. “No es físicamente posible que una persona esté en Pilar y ocho minutos después esté adentro del Paseo Alcorta pagando en la caja de una juguetería”, razonaron los acusadores.
En el juicio expusieron también la filmación de una cámara de seguridad que registró a Pachelo saliendo del barrio privado a las 18.59.
