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El Instituto de Lotería bonaerense anuló la resolución que instrumentaba promociones e incentivos para las personas que apuestan en los bingos de aquella provincia.
La norma establecía un sistema de promociones mediante el cual el cliente accedía a créditos -por ejemplo, de 100 puntos cada 20 pesos que jugara en los máquinas tragamonedas-, con el fin de que luego canjeara el total obtenido por créditos en otro dispositivo de juego.
La anulación de la medida fue dispuesta ante las críticas que suscitó el aliento al juego y que incluyó una denuncia penal contra el titular del organismo, Jorge Rodríguez, por incumplimiento de los deberes de funcionario público, ya que se valoró que propició acciones que favorecían la ludopatía.
El instituto derogó la promoción y declaró que lo hacía con el fin de brindar al apostador señales concretas sobre la ponderación de la salud pública en lo concerniente a la adicción al juego. «Ante cualquier duda sobre efectos colaterales para la salud mental de jugadores con patología vinculada a la ludopatía, debe primar el deber protectivo por parte del Estado provincial», se precisó en la resolución.
