En Estados Unidos, Alex Saab, el empresario colombiano de 49 años acusado de ser el principal testaferro del presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, tuvo su primera audiencia presencial en un tribunal federal de Miami, después de la cual el juez Robert Scola pospuso el inicio del juicio, previsto originalmente para el próximo 3 de enero, hasta que se resuelva una apelación que presentó la defensa.
Los abogados de Saab alegan que éste tiene status diplomático y que no puede ser juzgado en Estados Unidos, en línea con la postura del gobierno de Maduro, que aduce que Saab es un agente comisionado para conseguir alimentos y medicinas.
En esta etapa del caso, luego de años de negar nexos con el colombiano, el aparato chavista ahora lo presenta como “representante permanente adjunto” de Venezuela ante la Unión Africana.
El magistrado suspendió el comienzo del debate argumentando que, mientras esté en curso la apelación, interpuesta en un tribunal del estado de Georgia, no puede empezar.
Por lo pronto, durante la primera semana del próximo año, el 7 de enero, se decidirá en otra audiencia si el juicio se hace o si cabe un nuevo aplazamiento.
En esta etapa del caso, después de años de negar nexos con el colombiano, el aparto chavista ahora lo presenta como “representante permanente adjunto” de Venezuela ante la Unión Africana.
A partir de investigaciones de varios medios de prensa, trascendió que las pesquisas que motorizó EEUU establecieron que Saab y sus socios crearon una red de empresas fantasmas en los cinco continentes para triangular operaciones y enriquecerse con la fachada de operaciones humanitarias.
Entre los hechos con los que se vincula al empresario figuran el fraude de las cajas de los Comités Locales de Abastecimiento y Producción (CLAP), un programa de Maduro para distribuir comida entre las personas más golpeadas por la crisis que ocurre en el Estado caribeño.
También indica que diseñó entramados para comerciar petróleo, oro y otras materias primas al margen del sistema financiero internacional, con el fin de eludir las sanciones estadounidenses contra el régimen de Maduro.
Estados Unidos lo acusa, además, de ofrecer sobornos a funcionarios chavistas en el extranjero para tener acceso preferente a licitaciones públicas.
A solicitud de EEUU, Saab fue detenido en Cabo Verde el 12 de junio del año pasado y permaneció más de un año en una prisión del archipiélago africano antes de ser extraditado, a mediados de octubre pasado.
Como parte del acuerdo de extradición, Estados Unidos desestimó siete de los ocho cargos que se le imputaban y actualmente sólo será juzgado por el delito de conspiración para blanquear capitales.