ESCUCHARJavier Lagares se presentó ante la fiscalía de Eve Flores. Dijo que desconocía qué pudo causar la explosión. El dueño del depósito continuará detenido. Ambos siguen imputados por el delito de estrago culposo agravado. Comenzaron las demoliciones.
El encargado técnico de la planta Raponi Industrial Química, Javier Lagares, quedó ayer en libertad luego de declarar ante la fiscal de instrucción Eve Flores y pagar una caución de 200 mil pesos. Pese a todo, el profesional continuará imputado bajo el delito de estrago culposo agravado.
Según confirmó el abogado defensor de Lagares, Gabriel Gramática Bosch, su cliente declaró lo que ya venía diciendo: que era un asesor externo, que hace semanas no iba a la planta y que no sabe qué pudo ocasionar la explosión.
Mientras tanto, Sergio Raponi, dueño del depósito químico, seguirá detenido en la cárcel de Bouwer. Raponi se presentó ante la fiscalía de Flores y se abstuvo de declarar como una estrategia defensiva. Su defensa también pidió que lo excarcelen, pero el planteo fue rechazado.
Al salir de Tribunales, el abogado de Raponi, José Dantona, dijo que a su cliente «se le notificó el hecho por el cual se le acusa, y muy rápidamente se le informó de las pruebas que hay en su contra, pero la misma acusación dice que todavía no se conocen las causas que motivaron la explosión».
Cabe destacar que el miércoles se allanó una oficina de Raponi, donde se habría hallado un depósito ilegal de elementos químicos no inflamables.
La fiscal Flores, por su parte, ya tiene en su poder los resultados preliminares de los peritos de Bomberos: “En este momento ya tengo algunos informes preliminares que han sido muy importantes. Las conclusiones no se pueden adelantar aún”, explicó.
Demoliciones
Por otra parte, en la tarde de ayer se iniciaron las tareas técnicas y operativas de demolición de las construcciones que se consideran irrecuperables a raíz de la explosión, algunas con riesgos de derrumbe.
La onda expansiva de la explosión -ocurrida alrededor de las 21 del jueves pasado-, alcanzó unas 10 manzanas a la redonda, afectó a unas 700 familias y a alrededor de 450 construcciones, según el relevamiento municipal.
