El Gobierno de Armenia reportó que más de 205 militares murieron y cerca de 300 resultaron heridos la semana pasada en los peores enfrentamientos fronterizos con Azerbaiyán desde el conflicto bélico que comenzó en 2020, por el control de la zona fronteriza de Nagorno Karabaj.
En tanto, el Consejo de Seguridad armenio precisó que hay dos civiles muertos y otros dos desaparecidos y 20 soldados prisioneros.
Del lado azerbaiyano, el balance hasta la fecha es de 79 militares muertos.
Las cifras suministradas por Armenia elevan a casi 300 el número de bajas en ambos bandos.
La escalada que se inició el martes de la semana pasada pone en jaque el frágil proceso de paz entre Armenia y Azerbaiyán, dos países rivales del Cáucaso que comparten casi 1.000 kilómetros de frontera.
El domingo, de visita a Ereván, la capital de Armenia, la presidenta de la Cámara de Representantes estadounidense, Nancy Pelosi, condenó lo que definió como ataques “ilegales” de Azerbaiyán.
El desplazamiento de Pelosi a Armenia marcó un nuevo signo de acercamiento entre Washington y Ereván mientras Moscú -mediador tradicional en la región- se concentra en su ofensiva en contra de Ucrania.