La Pampa abrió este domingo el calendario electoral en el país con todas las miradas puestas en la definición del candidato a gobernador dentro de la oposición. Por primera vez, además, se aplica la ley de la paridad de género.
Sin embargo, la participación de votantes fue muy poca y el final -con el cierre de urnas a las 18:00 horas- es abierto con una pelea sufragio a sufragio, aunque con una ventaja de unos 3.000 votos a favor de Martín Berhongaray sobre Martín Maquieyra.
La votación fue normal y sin inconvenientes, pero con un ritmo cansino y escasa participación a lo largo de toda la jornada. Con el 52% de las mesas escrutadas, el postulante radical se impone por unos 10.000 votos a 7.000 votos con una tendencia casi irreversible.
El impacto nacional del triunfo radical hizo que arriben a la provincia varios referentes nacionales del partido centenario. El resultado también significa un tropezón para la recorrida territorial que viene haciendo por el país el pretendido postulante a presidente del PRO, Horacio Rodríguez Larreta.
La elección también marca la cancha de cara al futuro: decide en algún sentido el tono de la campaña rumbo a las generales del 14 de mayo, reperfila liderazgos en la alianza y tiene impacto en el país, porque es la primera votación de este año electoral y los dirigentes nacionales de una y otra fuerza pusieron toda la carne en el asador.
Las PASO pampeanas son un artilugio extraño, ya que solamente son obligatorias para los partidos que presentan disputa interna, manteniendo al resto de los espacios políticos fuera de la misma. Esto le quita a las primarias su posibilidad de funcionar como encuesta electoral, cargando sobre el sector público el peso de internas limitadas a algunos partidos. Además de la baja participación por 3l descrédito en el que ha caído la política, las altas temperaturas hicieron que mucha gente desista de ir a votar.
¿Alguien me puede decir algo acerca de dónde quedaron los ideales de la Revolución del Parque?
Aaah… No tenés idea. Así estamos.