ESCUCHARLa Justicia Electoral confirmó el triunfo por 3,3 puntos sobre Luis Juez. Sin embargo, tendrá minoría en la Unicameral. También en el Tribunal de Cuentas, clave en el control de la legalidad de los actos de gobierno. Los cuatro legisladores de fuerzas minoritarias serán la llave para aprobar proyectos que generen resistencia
Martín Llaryora quedó consagrado como el nuevo gobernador electo que asumirá el próximo 10 de diciembre, luego de que ayer la Justicia Electoral dio por concluido el escrutinio definitivo y confirmó una diferencia de 3,3 puntos porcentuales sobre el candidato de Juntos por el Cambio, Luis Juez.
En paralelo, también los resultados finales sirvieron para dilucidar cómo quedará conformada la futura Legislatura y el Tribunal de Cuentas, ámbitos que le serán adversos al futuro mandatario.
Es que, en este último caso y en función de la escasa diferencia que mostraba el escrutinio provisorio, era clave aguardar los cómputos definitivos que, aunque con una distancia muy ajustada, determinaron el dibujo final de la Unicameral y la integración del Tribunal de Cuentas.
Se produjo así un hecho inédito desde que el peronismo está en el poder. Sucede que hasta ahora siempre tuvo mayoría propia en la Legislatura, al punto de poder votar proyectos como las sucesivas reformas previsionales que generaron fuerte oposición del resto de los bloques legislativos que, en minoría, no tenían chances de torcer la votación.
Ahora, Llaryora deberá articular consensos para aprobar eventuales proyectos que, por su tenor, muestren reparos entre las otras fuerzas políticas, principalmente de Juntos por el Cambio.
Asimismo, cobran particular importancia los cuatro legisladores de las fuerzas minoritarias que lograron representatividad en el parlamento.
Obviamente, responden a partidos políticos de muy diferente extracción: desde la izquierda hasta los libertarios, pasando por el vecinalismo de García Elorrio y el kirchnerismo.
En cuanto al Tribunal de Cuentas, también será inédito que un gobernador ejerza su mandato en minoría en ese órgano.
En ese contexto, habrá que ver si Llaryora aprovecha los meses que quedan hasta el 10 de diciembre y la conformación actual de la Legislatura, con mayoría de Hacemos Unidos por Córdoba para avanzar con proyectos que eventualmente requieran de ese apoyo que no tendrá, al menos por su cuenta, una vez que asuma.
Los resultados
Según los datos informados ayer por la Justicia Electoral, la fórmula encabezada por Martín Llaryora y Miryam Prunotto obtuvo 870.935 votos (45,2%) y se impuso sobre Luis Juez y Marcos Carasso, quienes lograron 806.541 sufragios (41,9%).
En cuanto a la Legislatura, ámbito en el que el escrutinio provisorio dejó abierto el resultado y la conformación del parlamento, quedará constituida con 33 legisladores de Hacemos Unidos por Córdoba, igual número para Juntos por el Cambio, un representante de Encuentro Vecinal Córdoba, otro del FIT-Unidad -izquierda-, uno por La Libertad Avanza y el restante en representación de Creo en Córdoba.
La diferencia en la votación fue ciertamente ajustada. Según los cómputos oficiales, Juntos por el Cambio obtuvo 712.063 voluntades (41,8%) y Hacemos Unidos por Córdoba 710.281 (41,7%.), esto es una diferencia de 0,1 punto porcentual.
Respecto al origen de los legisladores, el oficialismo logró 20 por distrito único y 13 departamentales. Igual fue el origen para Juntos por el Cambio.
El resto de las fuerzas obtuvo sus legisladores sólo por distrito único.
Tribunal de Cuentas
En relación al Tribunal de Cuentas, el resultado también favoreció a Juntos por el Cambio por escaso margen.
Como fuere, será la oposición quien tenga la mayoría en ese órgano clave para el control de la legalidad de los actos de gobierno.
No hay antecedentes de una situación similar desde el retorno de la democracia, en 1983.
El Tribunal estará conformado por María Fernanda Leiva y Beltrán Corvalán por Juntos por el Cambio mientras que la vocalía por Hacemos Unidos por Córdoba la ocupará Silvina Rivero.
Beltrán Corvalán, contador de profesión, es un ex concejal juecista que ahora se autopostulaba como precandidato a intendente. En tanto, Fernanda Leiva, abogada, actualmente ocupa una vocalía por la oposición en el Tribunal de Cuentas de la ciudad de Córdoba.
Por el lado del oficialismo, ingresará Sillvina Rivero, actual ministra de Coordinación de Juan Schiaretti.
En el conteo oficial para ese segmento, Juntos por el Cambio obtuvo 709.249 votos (42%) mientras que Hacemos Unidos por Córdoba logró 704.682 sufragios, 41,7% del total.
