En la Argentina ya hay un millón de teletrabajadores, es decir, personas que trabajan a distancia, con poca o nula asistencia física a las oficinas de sus empresas. Estos números ubican a este país a la cabeza de la tendencia en la región. A nivel mundial, un estudio de IDC indica que para 2009 los trabajadores móviles serán el 25 por ciento de la población empleada.
“Tan es así, que el Ministerio de Trabajo presentó en julio un proyecto de ley del régimen jurídico del teletrabajo en relación de dependencia para ser tratado por el Senado. El proyecto hace hincapié en la igualdad de derechos respecto del resto de los trabajadores, de la preservación de la identidad y del domicilio del empleado, y del equipo de trabajo y las condiciones generales en que se desarrolla la tarea”, explicó a Comercio y Justicia Lisandro Gioda, jefe de Personal de Consultores de Empresas SRL.
– ¿Cómo es el desarrollo de esta tendencia en Córdoba?
– Principalmente se produce en profesiones con amplia posibilidad de desarrollar estrategias de Business Process Outsourcing o Externalización de Procesos de Negocios. Las áreas que más demanda presentan en la materia son aquellas asociadas a los procesos de comunicación e información. Así, es común que existan empresas que tercerizan con teletrabajadores sus acciones de comunicación y relación comunitaria, sin que ellos se desempeñen físicamente en la empresa. Es bueno aclarar aquí que no se trata de contratación de agencias o consultoras. Son profesionales que brindan servicios a una organización pero no asisten regularmente a sus oficinas a cumplir la tarea, sino que trabajan por objetivos.
– ¿Qué proyecciones hay para este año?
– No existen estudios en Córdoba que midan el impacto de esta modalidad de trabajo. Sin embargo, un estudio privado sostiene que 2008 puede ser el año del despegue de esta modalidad laboral en la región latinoamericana.
– ¿Cuáles son las principales ventajas y desventajas de esta forma de empleo?
– Una idea que se tiene del teletrabajo es que es más cómodo porque es difícil que a uno lo controlen cuando el jefe no está a mano. Pero no es tan así. Una combinación de tecnología y buena búsqueda de personal son claves. El empleado que trabaja desde su casa debe poseer grandes dosis de responsabilidad, organización y fijación en los objetivos. Además, debe estar comunicado con diversas plataformas que permitan su rápida localización. Aunque parezca cómodo, este sistema también presenta desventajas ya que el horario de trabajo invade la vida cotidiana. Por otro lado, los empleadores no pueden exceder sus capacidades ni ocupar el tiempo libre del trabajador sólo porque éste puede realizar su tarea desde cualquier lado. Es importante que jefes y empleados pongan límites al tiempo que usan para trabajar.
– ¿Qué beneficios tiene para las empresas trabajar con teletrabajadores?
– En general, la tendencia del teletrabajo se relaciona con el bienestar de los empleados y la flexibilidad laboral es hoy por hoy un valor agregado que las empresas pueden ofrecer. La mayoría de las personas valoran mucho esta posibilidad y en muchas oportunidades se convierte en un factor decisivo al momento de ingresar a trabajar en una compañía. El trabajo remoto requiere un gran compromiso y responsabilidad de quien lo utilice. La experiencia