Los jueces Martín Irurzun y Eduardo Farah, integrantes de la Sala II de la Cámara Federal de Apelaciones, confirmaron el sobreseimiento del titular de la Aduana, Juan José Gómez Centurión. La medida fue dispuesta en su momento por el juez Marcelo Martínez de Giorgi, en el marco de la causa iniciada por una denuncia del transportista Miguel Paolantonio en contra del funcionario, por la presunta comisión de los delitos de violación de secretos, abuso de autoridad, falso testimonio y encubrimiento.
Fuentes periodísticas
En su fallo, la alzada reivindicó el derecho de los periodistas a no revelar la identidad de sus fuentes.
La exposición de Paolantonio ocurrió luego de que se difundió una investigación del periodista Matías Longoni sobre la causa conocida como “la mafia de los contenedores”, por la cual está preso Claudio Minnicelli, cuñado del ex ministro de Planificación Julio de Vido.
A raíz de otro expediente paralelo, Gómez Centurión fue separado preventivamente de su cargo; y luego repuesto.
Longoni expuso que Paolantonio y sus dos hermanos, Alejandro y Raúl, estaban vinculados con una firma que traía mercadería importada de China con datos falsos sobre el contenido y el peso de los contenedores y que, al ser retenidos en la Aduana, lograban su liberación a cambio de dinero.
Los hechos también se relacionan con la obtención de Declaraciones Juradas Anticipadas de Importación (DJAI) destinadas a obtener dólares en el marco del “cepo cambiario” establecido durante el kirchnerismo, cuando Ricardo Echegaray estaba al frente de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP). Esos hechos son investigados en otra megacausa por el juez en lo Penal Económico Gustavo Meirovich.
Reserva
Según Paolantonio, Gómez Centurión “habría accedido a elementos obtenidos en forma ilícita”, a partir de mails y capturas de pantalla aportadas por Longoni a la Justicia en lo Penal Económico. Sin embargo, el profesional hizo uso del derecho de reservarse el nombre de quien le había proporcionado parte de los datos.
“Según los postulados de la doctrina sobre la materia, entre los aspectos esenciales de la libertad de prensa, como derecho reconocido y de ejercicio garantizado por la Constitución Nacional y los pactos internacionales con esa jerarquía, se inscriben el acceso libre a las fuentes de información, la posibilidad de recoger noticias, transmitirlas y difundirlas, y de resguardar razonablemente el secreto de la fuente de la que se han obtenido”, detalló.
Sin éxito, los abogados de Paolantonio desacreditaron la normativa que ampara a los periodistas, al sostener que se trata de un “pseudo escudo protector”.
