Tras más de dos horas, terminó la operación de la vicepresidenta Cristina Fernández, quien se sometió esta mañana a una histerectomía en el Sanatorio Otamendi.
La titular del Senado salió de su casa a las 6:34 de la mañana, acompañaba por su hermana Giselle, y prefirió no hacer comentarios al ser abordada por un grupo de periodistas que hacía guardia en su domicilio. Ingresó al centro médico a las 6.45, donde se llevaron a cabo los protocolos prequirúrgicos, y luego fue intervenida por un cirujano especializado en Tocoginecología.
El procedimiento programado, que comenzó a las 8 aproximadamente prevé una internación posterior de entre tres y cinco días. Tras ese lapso, la vicepresidenta podría comenzar a reincorporarse a sus actividades de manera gradual, hasta retomar plenamente su rutina en unas tres semanas.
El profesional a cargo del procedimiento fue Fernando Gorosito, un reconocido cirujano especializado en Tocoginecología. Según e parte médico la intervención se hizo “por la vía laparoscópica”.
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