El desarrollo de determinadas destrezas en la forma de razonar puede hacer la diferencia en una organización. Su aplicación permite crear, planear, decidir, juzgar y hacer frente al cambio.
En general y, aunque no nos guste admitirlo, no somos buenos pensadores. Y lo que es peor, no somos conscientes de ello.
En dialogó con Factor, German Aimar -contador público- abordó el tema sobre técnicas de pensamiento que pueden ser de gran utilidad para optimizar el desenvolvimiento y la toma de decisiones en una organización. En tal sentido expresó:
“Observamos ciertos rasgos (información) de una realidad y emitimos un juicio sobre la totalidad de la situación con base en tales datos y a los patrones dominantes de pensamiento que tenemos almacenados en nuestra memoria. Vemos lo que estamos preparados para ver, o sea, vemos y juzgamos. Nos precipitamos a las conclusiones. Sin embargo, un buen pensador ve, explora y juzga. Piensa lentamente, paso a paso y utiliza herramientas específicas”.
– ¿Qué hacer para lograr un pensamiento direccionado?
– Edward de Bono, el especialista creador del pensamiento lateral y que ha difundido sus descubrimientos en empresas como 3M, Shell, Ford, IBM, Merck y Pfizer, ha creado herramientas que nos permiten dirigir nuestra atención en determinadas direcciones para explorar un tema y ampliar nuestra percepción, o sea la manera en la que vemos el mundo. Si no dirigimos nuestra atención, solamente veremos aquello que nos resulta familiar.
– ¿Cuáles son esas herramientas?
– Algunas de sus técnicas en apretada síntesis son:
Más, Menos, Interesante (MMI). Significa dirigir la atención hacia los aspectos más (positivos), después hacia los menos (negativos) y finalmente hacia los interesantes. Este último término significa algo que vale la pena tener en cuenta o ser comentado.
Consideración de todos los factores (CTF). Implica “considerar todos los factores”. El pensador hace un esfuerzo deliberado para ver todos los factores que son relevantes para el pensamiento. ¿Qué deberíamos tener en cuenta?
Consecuencias y Secuelas (CyS). Significa dirigir la atención hacia las “consecuencias y secuelas”, sean las que sean. ¿Qué sucederá en el futuro? ¿Cuáles son las consecuencias inmediatas, las consecuencias a mediano, corto y largo plazo? Quizás no resulte fácil verlas pero hay que hacer el esfuerzo.
Finalidades, Metas y Objetivos (FMO). Se centra en cuáles son las “finalidades, metas y objetivos”. Normalmente tenemos una vaga idea de lo que estamos intentando hacer. La herramienta FMO nos exige ser claros. ¿Qué queremos conseguir? ¿Cuál es la finalidad? ¿Cuáles son los objetivos? Verbalizar estas cosas es muy distinto a tenerlas solamente en algún rincón de la mente.
Primeras Prioridades Importantes (PPI). Esta herramienta dirige la atención a las “primeras prioridades importantes”. No todo tiene la misma importancia. En cualquier lista, algunas cosas son más importantes que otras. Aquí se dirige la atención a las cosas importantes y a las prioridades. También dirige la atención hacia lo que hay que hacer o considerar en primer lugar.
Alternativas, Posibilidades y Opciones (APO). Cuestiona las “alternativas, posibilidades y opciones”. ¿Cuáles son las alternativas? Puede haber alternativas de explicación, de percepción y de acción. ¿Cuáles son las posibilidades? ¿Cuáles son las opciones, tanto las obvias como las menos evidentes? Esta herramienta indica multiplicar las posibilidades.
Visión de Otras Personas (VOP). Se centra en el “punto de vista del otro”. Aquí, el pensador intenta entrar en la mente de las otras personas involucradas para ver qué piensan. Se hace un auténtico esfuerzo para ver de dónde viene la otra persona. No se trata de decir qué es lo que la otra persona debería estar pensando sino qué es lo que debe estar pensando.
– ¿Cómo y de qué manera pueden emplearse estas técnicas?
– Estas herramientas pueden utilizarse individualmente. Deberemos elegir la más apropiada a la situación. El VOP es importante si hay otras personas implicadas. Si hay que evaluar una propuesta son importantes el CyS y el MMI. FMO es sumamente útil cuando debemos diseñar un plan de acción. También pueden usarse como parte de un modelo o estructura para pensar sobre un tema siguiendo una secuencia preestablecida: FMO, CTF, OPA, PPI, CyS y MMI.
En cualquier caso, accedemos a aspectos de la situación o realidad que, de otra forma, se nos habrían pasado por alto. Podemos apreciar el cuadro en una mayor amplitud al dirigir nuestra atención hacia los distintos aspectos mencionados.
El ámbito de aplicación de las destrezas es muy amplio: resolver problemas, desarrollar una tarea, alcanzar un sueño, crear un diseño, mejorar en una dirección decidida, negociación, conseguir alguna información, planear y organizar, elegir entre alternativas, decidir, juzgar, comunicar, hacer frente al cambio, etcétera.
– ¿Cúal es su conclusión?
– Dice Edward de Bono: “Todo esto puede parecer artificial pero funciona. El hecho de pensar, a veces, es algo artificial y deliberado. De no ser así, damos por hecho y asumimos que hacemos cosas cuando en realidad no estamos haciendo nada. La mayoría de las personas dirían que tienen en cuenta las consecuencias de una acción pero los experimentos muestran que la petición deliberada de contemplar las consecuencias con una CyS da como resultado una mejor apreciación. La atención necesita dirigirse deliberadamente. Hay demasiadas personas que creen que son buenas pensadoras cuando en realidad no lo son”.
Ejercicio
Apreciar las consecuencias y secuelas de una determinada tecnología sobre nuestro negocio.
– Inmediato (a un año)
– A corto plazo (1 a 5 años)
– A mediano plazo (5 a 20 años)
– A largo plazo (más de 20 años)