Lo aseveró el especialista Gustavo Scarpetta, quien -además- advirtió de que existen US$600 millones por mes que se van por el sector turismo, un posible elemento de ajuste por la nueva administración vía un mayor impuesto PAIS o alguna otra restricción
La economista Silvina Batakis, actual ministra de Economía en reemplazo del saliente Martín Guzmán, luego de su asunción mencionó que los tres pilares en que basará su gestión son la solvencia fiscal, la continuidad del programa económico del Gobierno y el aumento de las exportaciones. “Factor” suplemento de Comercio y Justicia dialogó con Gustavo Scarpetta, contador público y especialista en comercio exterior, quien brindó detalles sobre qué se espera en materia de comercio exterior y restricción en las importaciones.
¿Cuáles cree que eran los caminos previos al nombramiento de la nueva ministra?
En el interín de despertar de la siesta del sábado con la renuncia del ministro Guzmán y esperar el nombramiento de la reemplazante durante 24 horas, hubo danza de nombres para cubrir el cargo; desde algunos muy ortodoxos hasta algún “tapado”. Aún sin nombre de sustituto, los caminos eran dos: devaluar y eliminar la brecha o profundizar el cepo, no devaluar y cuidar los dólares, para mejorar las reservas. Cuando se conoció el nombre de la titular de la cartera de Economía, era claro que se tomó el segundo camino.
¿Qué significa ese camino?
Batakis habló de ser asertivo en el uso de divisas, más para producción, no gastarlas mal. Mantuvo la idea de segmentación de tarifas y se mostró muy clara respecto a nivelar los números fiscales.
“Ser asertivo” es dar divisas a la industria, pero sería una profundización del cepo, porque no hay dólares. La forma de que haya dólares sería devaluar. La ministra escribió anteriormente que estaba de acuerdo con tipos de cambio específicos como los del turismo.
Los 600 millones de dólares por mes que se van por sector turismo serían uno de los elementos a ajustar por la ministra, vía un mayor impuesto PAIS o alguna restricción extra como la que debutó el lunes respecto a las compras puerta a puerta.
La realidad marcaba que para el sector importador, tanto el camino uno o dos, era un golpe a su realidad, enmarcada en la falta de divisas crónicas de nuestro país.
¿Cómo se han comportado las importaciones en 2021?
En 2021, Argentina importó US$63 mil millones de dólares. De esos, US$5.000 millones, fueron por petróleo; US$3.000 millones, por autopartes; US$2.600 millones, por porotos de soja; US$1.700 millones, por autos y US$2.000 millones, por celulares.
Los rubros que se han mencionado como mercaderías por las cuales se fueron divisas fueron aviones (US$173 millones), juguetes(US$106 millones), motos (US$300 millones), neumáticos (US$375 millones) y bananas (US$270 millones).
Si el camino es no devaluar, deberá cortarse el uso de divisas para poder acumularlas. El turismo parece tener todas las fichas para ser impactado. ¿Alcanzará o habrá que cortar en importaciones?
La ministra habló de ser asertivo en el uso de divisas; en este caso, eso significaría dárselas a la producción, es decir, autopartes y petróleo por la necesidad de la energía.
El campo y tarifas
Según Scarpetta, la industria argentina vive de las divisas que genera el campo.
“Nuestra industria es deficitaria en dólares, y usa las que trae el campo. Cuando el agro tiene buenos precios, no hay cuello de botella, pero cuando ocurre una sequía o alguna situación internacional adversa, nuestro país se queda sin dólares”, resaltó. Mencionó que hoy se tiene una situación positiva externa, pero Argentina no ha podido acumular reservas por múltiples factores. Según el diagnóstico oficial, la causa podrían ser las amplias importaciones. La brecha cambiaria podría ser la que evita el fortalecimiento de reservas.
Una gran cuestión es si la nueva ministra podrá avanzar con la segmentación de tarifas, que significa un alivio fiscal. “Batakis no tendrá la oposición del kirchnerismo duro, pero también le exigirán medidas más cercanas a ese grupo político como el ingreso universal o impuestos a la renta extraordinaria”, dijo.
Según el especialista, el horizonte económico parece ser noviembre, cuando comenzará el Mundial de Fútbol, que será un tema excluyente. En diciembre vendrán las fiestas y, luego, las vacaciones. En marzo entran divisas por la soja y comenzará la lucha por las elecciones Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO). “Hay que llegar a noviembre”, concluyó.