La comunidad de los profesionales en Ciencias Económicas fue invadida por un profundo dolor ante la pérdida física del doctor Antonio Daniel Fourcade, el 28 de abril pasado, cumpliéndose ayer un mes su desaparición.
Por Consejo Profesional de Ciencias Económicas de Córdoba (CPCE) –
El Consejo Profesional de Ciencias Económicas tuvo el privilegio de que presidiera la institución durante siete años (1989/92 y 1994/98), a la cual ingresó apenas egresado con el título de contador público (1971) y a la que se brindó plenamente, con una reconocida actitud de servicio y liderazgo en todos los cargos que ocupó, como en su prolongada y activa vida institucional.
Su especialidad profesional fue en materia societaria, constituyéndose en un destacado consultor de empresas y profesionales. Amante de la docencia, con una extensa trayectoria en las facultades de Ciencias Económicas de las universidades Nacional (UNC), Católica (UCC) y Blas Pascal, como profesor titular de Sociedades Comerciales, de grado y posgrado, así como en la asignatura Ética profesional y responsabilidad social.
En el ámbito de la investigación y la capacitación, cuenta con publicaciones de libros y múltiples trabajos y artículos; disertaciones en numerosos cursos, seminarios, jornadas y congresos provinciales, nacionales e internacionales, tanto en temas de su especialidad como de su experiencia y vivencia como líder y apasionado de su profesión, siendo presidente del comité organizador y ejecutivo de ornadas provinciales y regionales y congresos nacionales
En lo institucional, su primer mandato lo asumió en que la sociedad argentina se vio signada por la profundidad de hechos políticos y económicos que llevaron al país a atravesar una grave crisis, por lo que el CPCE efectuó una ferviente convocatoria a todos los colegas para estrechar filas en pro de rescatar los valores éticos y solidarios, que más que nunca debían prevalecer en el desempeño de nuestra actividad profesional y fortalecer los lazos de unidad entre todos los colegas de la provincia.
Es imposible y no pertinente realizar una reseña de su fructífera y destacada labor en la conducción de nuestra entidad, ya que correspondería detallar todo el accionar en materia de promoción, defensa y jerarquización de la profesión, el trabajo conjunto con las universidades, la presencia institucional y su inserción en la sociedad, la integración del CPCE y el Colegio, nuevas coberturas y técnicas de gestión en servicios sociales (a nivel Facpce, Fondo solidario de Alta Complejidad), motivación para una mayor participación de los jóves profesionales (jornadas y edición del libro Punto de partida); así como en lo edilicio, tanto en sede central como en las delegaciones.
En su tesis doctoral señala Antonio D. Fourcade, para la redefinción del Patrimonio Neto, que parte de determinados presupuestos; entre ellos “la concepción estructural de ese patrimonio, considerado como una universalidad de bienes afectados hacia un objetivo determinado”, que seguramente nunca pensó que es totalmente aplicable a su persona, ya que todos los que pudimos conocerlo, orgullosamente podemos resaltar que fue un ser admirable en todas las dimensiones humanas, justamente porque cimentó su vida en valores -honradez, entrega, servicio, rectitud, responsabilidad, respeto… es decir, “sus bienes”), lo que le permitió realizarse como persona y profesional, brindándose plenamente a “esos objetivos determinados”, su familia, sus amigos, la profesión, las instituciones y la sociedad.