La 34ª edición de FOA, la tradicional exposición nacional de arquitectura, industria, diseño interior y paisajismo que se llevó a cabo del 15 de septiembre al 16 de octubre pasados en una casona ubicada en pleno corazón del barrio de Belgrano en la ciudad de Buenos Aires. La muestra se extiende a lo largo de 4.000 m2, donde se distribuyen las áreas de interiorismo y paisajismo en cinco plantas de más de 350 m2 cada una, que albergan los originales espacios a cargo de 45 expositores
Como lo viene haciendo desde hace más de tres décadas, Casa FOA, la tradicional exposición nacional de arquitectura, industria, diseño interior y paisajismo, volvió a cumplir con su compromiso de “inspirar” en su edición número 34 que se llevó a cabo del 15 de septiembre al 16 de octubre pasados en una casona ubicada en pleno corazón del barrio de Belgrano en la ciudad de Buenos Aires.
En esta oportunidad, la sede elegida que se encuentra sobre la calle Luis María Campos 1336 (entre Teodoro García y Zabala), es una típica construcción en altura de los años 50 que personifica de manera impactante el espíritu ecléctico de aquella época.
Allí, el público pudo recorrer los diferentes ambientes personalizados a cargo de expositores y auspiciantes con lo mejor del diseño nacional.
La muestra se extendió a lo largo de 4.000 m2 donde se distribuyen las áreas de interiorismo (1.750 m2) y paisajismo (2.250 m2). Además, cinco plantas de más de 350 m2 fueron divididas arquitectónicamente piso por piso, a modo de organizar las distintas etapas de la vida, sirviendo como inspiración para que los 45 expositores plasmen sus ideas en los variados espacios.
Las puestas estuvieron pensadas como un recorrido ascendente por las distintas tendencias generacionales del concepto de habitar, comenzando por cómo viven los millenials, las parejas jóvenes y también las adultas, siempre desde el punto de vista del interiorismo.
En esta nueva edición, el interiorismo enfocado en estilos de vida fue el protagonista absoluto, sumado a las preponderantes áreas verdes que se observan tanto en el frente como en el contrafrente de la sede, siendo un convite al descanso y la pausa.
Así, se pudo apreciar un oasis visual, una conexión con la naturaleza, aun estando en medio de la ciudad. Una nueva mirada, cada vez más incipiente, que atrapa tanto al público tradicional que lo visita como a las nuevas generaciones conscientes de optar por una forma de vida más fresca, relajada y armoniosa.
El arte estuvo presente como en las últimas ediciones, en las que se puede disfrutar del jardín de las esculturas y las maravillosas obras que están presente en toda la muestra. Y como sucedió en 2016, la desarrolladora BrodyFriedman&Friedman, dueña de la propiedad, encarará el proyecto que llevará el nombre de “Palacio Campos” y consiste en un emprendimiento residencial con unidades de lujo y de grandes dimensiones que marcarán el futuro del lugar.
Además, como ya es tradicional en la exposición, se pudieron apreciar los 12 proyectos finalistas del Concurso de Bancos Urbanos, que este año registró el número más alto de concursantes, y se volvió más federal por su alcance a casi todas las provincias.
Asimismo, como novedad de esta edición, todos aquellos que visitaron esta exposición se sorprendieron con la intervención de su fachada a cargo de los ganadores del Concurso Murales, realizado por María Pilar Tolosa y Julián Facundo Razquin y organizado por BrodyFriedman&Friedman.
El público también recorrió el espacio ganador de la Beca de Arquitectura y Diseño de Interior Casa FOA, creado por las arquitectas Laura Libenson, Carolina Nila Maciel y Maria Florencia López, un espacio multifunción para millenials. “Con esta nueva edición de Casa FOA 2017 ‘Luis María Campos’ Belgrano vio el renacer de aquella vivienda familiar de fachada ladrillera que en los años 50 supo combinar reminiscencias inglesas con elementos franceses y una disposición de plantas racionalistas”, declaró Alberto Robredo, gerente General del proyecto.
“Casa FOA se enorgullece en darle un nuevo aporte al desarrollo demográfico de Buenos Aires, siendo precursores de un incipiente Puerto Madero; de los silos de Dorrego; del Palacio Álzaga Unzué, que es parte del Hotel Four Seasons, del Monasterio de Santa Catalina de Siena, que hoy es centro de atención espiritual; y de tantos otros rincones de la ciudad que sumaron valor con la huella que deja el paso de la exposición”, agregó Marcos Malbrán, director General.
Fiel a su objetivo de difundir la vanguardia en diseño argentino, la industria y fomentar el arte en varias expresiones, Casa FOA se realiza siempre bajo la impronta solidaria de la Fundación Oftalmológica Argentina Jorge Malbrán, que brinda asistencia oftalmológica a personas de bajos recursos de todo el país.
La expo es un referente indiscutido de la agenda cultural de Argentina y una cita ineludible para conocer las últimas tendencias de arquitectura y diseño que congrega variadas propuestas vanguardistas.