El convenio sucedió en el marco de una nueva reunión de la mesa de diálogo que integran distintos actores de la cadena de valor agropecuaria. La incidencia de la medida fue significativa y afectó la actividad de puertos y plantas.
Autoridades de los ministerios de Transporte y de Agroindustria acordaron ayer con representantes de los productores y de los transportistas de carga un aumento de 12 por ciento para la tarifa de referencia del servicio de transporte de granos.
El acuerdo se alcanzó luego de una semana de piquetes que llevaron adelante los denominados “camioneros autoconvocados” en reclamo de un aumento de tarifas, protesta que había generado serias demoras en la carga de granos en los principales puertos.
En la víspera del nuevo convenio, el ministro de Transporte, Guillermo Dietrich, había instado a los camioneros a “volver a la ruta” y advirtió de que el Gobierno iba a realizar denuncias penales ante estas protestas.
Mas allá del acuerdo, Transporte dejó en claro que esta mesa de diálogo es un mecanismo de participación intersectorial para la definición de la tarifa de referencia y la protección de la competencia en la prestación del servicio, que “complementa la Ley 24.653, del Transporte de Carga, la cual establece que el precio del flete de granos es de libre contratación”.
De esta instancia de consenso participaron representantes de los transportistas, la Federación de Transportadores Argentinos (Fetra), la Confederación Argentina del Transporte Automotor de Cargas (Catac) y la Federación Argentina de Entidades Empresarias del Autotransporte de Cargas (Fadeeac).
En representación de la producción agraria participaron Federación Agraria Argentina (FAA), Confederación Intercooperativa Agropecuaria (Coninagro), Sociedad Rural Argentina (SRA), Confederaciones Rurales Argentinas (CRA) y la Federación Nacional de Acopiadores de Granos.
También participaron como invitados autoridades de los gobiernos provinciales de Santa Fe y Buenos Aires.
“Las partes se comprometieron a continuar reuniéndose de manera periódica para tratar temas que van más allá de la tarifa y hacen a la mejora de la competitividad”, destacó un comunicado del ministerio.
Impacto
En la víspera del acuerdo, los centros de corredores de cereales de Buenos Aires, Rosario, Santa Fe, Bahía Blanca y Entre Ríos habían solicitado que se “garantice la libre circulación de camiones cargados con granos”, al tiempo que puntualizado que “ningún reclamo sectorial puede centrarse en impedir un derecho fundamental establecido en la Constitución Nacional”.
Manifestaron en un comunicado conjunto: “La interrupción del comercio de granos -principal fuente generadora de divisas genuinas de la economía argentina- provoca problemas en la cadena de pagos del sector agroindustrial y daños económicos por tiempos perdidos y fletes que no pueden realizarse ante la imposibilidad de trasladarse por las principales rutas del país. Generando un enorme perjuicio a los productores y acopiadores”.
En tanto, respecto de la incidencia de la medida de fuerza, ayer se conoció que el ingreso de camiones a los puertos y plantas agroindustriales del Gran Rosario se redujo de manera significativa, informaron fuentes de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR).
Según se indicó, durante la semana que duró el paro ingresaron a estos espacios entre 850 y 900 camiones por día, en promedio.
Si se comparan estos números con los datos de la semana del 22 al 27 enero -cuando el conflicto con los transportistas autoconvocados de granos no se había desatado y el promedio alcanzado era de 3.200 camiones diarios- se estima una disminución de 74% en el ingreso de unidades con carga a las terminales industriales y puertos del Gran Rosario.
A su vez, la BCR indicó que hasta la jornada de ayer había unos 65 barcos demorados, sumando los distintos puertos.