ESCUCHARLa Provincia y el grupo Impregilo, controlante de la empresa Caminos de las Sierras -concesionaria de la Red de Accesos a Córdoba (RAC)-, renegocian contrarreloj los términos del contrato vigente y analizan diferentes escenarios para equilibrar la ecuación económico-financiera de la compañía, entre los que no se descarta un aumento de los peajes.
Las partes tienen hasta el 15 de octubre próximo para alcanzar un acuerdo, que deberá ser luego refrendado por la Legislatura.
En caso de no cerrarse un nuevo convenio, la compañía se retiraría de la concesión y volvería a activar un juicio iniciado ante el Ciadi, del Banco Mundial, cuyo monto alcanza 250 millones de dólares.
De acuerdo con información a la que tuvo acceso Comercio y Justicia, las partes ya avanzaron en la definición sobre los posibles escenarios futuros y las inversiones necesarias, aunque tampoco en esos montos logran acordar un valor.
En ese marco, un primer escenario contemplaría que Caminos de las Sierras realice sólo la operación y el mantenimiento de la red. Para ese último punto, la Provincia estima inversiones necesarias por 180 millones, que incluyen repavimentación de sectores claves de los accesos a Córdoba. Para la empresa, en tanto, esa cifra asciende a $260 millones.
También hay discrepancias respecto al plazo de esa inversión.
Más allá de las diferencias, ese escenario soportaría un peaje de entre 2 y 4 pesos, para rutas “turísticas” y “productivas”, respectivamente, tal como se ubicará la tarifa desde enero próximo.
No obstante, la concesionaria también pretende introducir como elemento las inversiones realizadas desde el inicio de la concesión hasta el momento y supuestamente no amortizadas por la tarifa anterior.
En ese marco, la Provincia insiste con adherir al estudio realizado por técnicos de la Universidad Nacional de Córdoba, que ubicó esos montos en poco menos de $500 millones. Para la empresa son $800 millones por el mismo concepto.
Esa diferencia implicaría posibles retoques en las tarifas vigentes.
Otro escenario posible contempla inversiones mayores por parte de la concesionaria. En ese contexto, la tarifa de peaje debería escalar sensiblemente hasta incluso llegar a valores superiores a los cinco pesos, según las obras que se incluyan.
De todas formas, está la alternativa de que esos proyectos sean realizados con fondos provinciales y de esta forma evitar un aumento del peaje. Con todo, desde el Ejecutivo admiten que no hay demasiado margen para inversiones públicas en la red, al menos por ahora.
Estaría descartado avanzar con peajes en la Circunvalación, tal como se consideró oportunamente.
Por lo demás, está prácticamente descartada la posibilidad de contar con fondos nacionales para financiar esas obras, pese a que se trata en su mayoría de rutas nacionales. “La relación está hoy muy deteriorada como para pensar en un aporte de la Nación”, advierten.
Por estas horas, representantes de Impregilo se encuentran en Italia para recibir instrucciones respecto a un acuerdo final o bien para imponer determinadas condiciones en las negociaciones, según confiaron a este medio desde la empresa.
En ese marco, si bien hay moderado optimismo en el Ejecutivo provincial, no descartan una salida de los italianos, en cuyo caso la Provincia debería hacerse cargo de manera provisoria de la red.
