Las 32 entidades que conforman la Adec consideraron “agobiante” la presión impositiva que ejercen los Estados, a los que caratularon de ineficientes e ineficaces. Ello es la causa del “deterioro en la competitividad” y del “desamparo de los ciudadanos”.
Las entidades asociadas a la Agencia para el Desarrollo Económico de la Ciudad de Córdoba (Adec) difundieron ayer un “manifiesto” en el que dejaron expuesta su “profunda preocupación por la situación económica, social e institucional” que atraviesa la ciudad, la provincia y el país e indicaron su “decisión” de “involucrarse” a fin de “monitorear la ejecución y el destino de los recursos que tributamos”.
Por medio de un comunicado, la entidad -conformada por 32 cámaras empresarias y organismos- dejó en claro que considera “agobiante” la presión tributaria que se ejerce sobre la actividad económica, “producto de un Estado que en sus distintos estamentos opera con escasa eficiencia y eficacia, provocando un deterioro de la competitividad y dejando desamparados a los ciudadanos que le delegan el poder”.
“Consideramos a nuestro territorio nacional una fuente inagotable de recursos productivos y humanos para un desarrollo sólido y sostenido”, indicaron los empresarios y agregaron: Eso hace “inexplicable cualquier marginalidad e insatisfacción de su población”.
Es por ello que “las entidades empresarias y asociadas de Adec -en un debate profundo y consensuado-, tomamos una decisión: queremos involucrarnos y monitorear la ejecución y el destino de los recursos que tributamos con el fin de contribuir a la conformación de estados eficientes, que brinden contención social, promuevan el desarrollo y la inclusión, que otorguen salud, educación y seguridad de excelencia, que garanticen la calidad en la prestación de los servicios públicos que administran o los delegados en terceros prestadores, que profesen una justicia independiente y eficaz; condiciones básicas e indispensables de una sociedad que merece vivir en armonía, crecimiento y paz social”, se indicó.
Consultado al respecto, el vicepresidente primero de la entidad, Carlos Candiani, explicó a Comercio y Justicia que 99% de las empresas argentinas está constituido por pymes que ya no “tienen capacidad para seguir haciendo frente a la presión impositiva y la cantidad de feriados que se determinan por una cuestión turística y por los que tenemos que seguir pagando salarios e impuestos sin producir”.
Reflexionando al respecto aseguró: “No podemos seguir más. Se agotó nuestra capacidad contributiva, no porque no queramos pagar sino porque no tenemos más posibilidades de hacerlo”, dijo y se preguntó: “¿Qué debemos hacer, cerrar, dejar a la gente en la calle? Ésa no es nuestra postura. Somos empresarios que queremos producir y dar trabajo”, dijo.
Al mismo tiempo, aseguró que el manifiesto difundido ayer no persigue ningún fin “belicoso”: “No queremos enfrentarnos a nadie, la idea es sumar, aportar ideas, proyectos y equipos técnicos para mejorar la situación la que atravesamos”.
En esa línea agregó: “Ya que no podemos decir mucho respecto de cómo recaudar más, queremos aportar sobre cómo gastar menos”.
Candiani explicó que el mismo comunicado que se difundió ayer a la prensa es el que les llegó (o llegará) a los representantes de todos los estamentos gubernamentales, municipio, Provincia y Nación, aunque respecto de esta última reconoció no tener “demasiada” injerencia.
“Sabemos que tanto con la Municipalidad como con la Provincia tenemos posibilidades de ser escuchados. Igual, le llegará el manifiesto a la gestión nacional”, explicó.
Incompatibilidades
Desde que fue conformada la Adec, la presidencia es ocupada por el intendente de la ciudad ya que la comuna es el “asociado mayoritario” en la conformación de la agencia.
En ese sentido, se planteó a Candiani la incompatibilidad de ser “arte y parte” de este manifiesto.
“Es prematuro aún para saber cuál va a ser la reacción de la Municipalidad”, dijo y aclaró: “De todos modos, reitero que no es nuestra idea ser belicosos ni enfrentarnos con nadie sino aportar ideas para que esto mejore”.
Consultado al respecto, el subsecretario de Desarrollo Económico y Estratégico de la Municipalidad y vicepresidente segundo de Adec, Juan Giunta, aclaró que no fue parte del debate y la redacción del manifiesto, aunque reconoció que, habiendo recibido una copia, aún no tenía conocimiento del contenido.
No obstante, una fuente del Palacio 6 de Julio admitió malestar por el tenor del documento difundido ayer.
Por otra parte, una fuente de Adec adelantó que se conformó una comisión para el “Estudio del impacto impositivo en las empresas cordobesas”, con lo que se pretende avanzar en los aportes hacia los gobiernos.
“Es otra de las cosas que se decidió en la última reunión del año de la Adec, de la que no participaron los representantes de la Municipalidad”, aclaró la fuente.
El fantasma de la corrupción
El manifiesto confirma la intención de los empresarios cordobeses de lograr “una discusión madura y responsable que permita lograr consensos y objetivos. Para alcanzarlos propiciaremos acuerdos sin imposiciones, sin pujas estériles de poder, sin validar políticas erráticas, sin convalidar personalismos, defendiendo la pluralidad, combatiendo toda acción de corrupción, entendiendo por ella la gran pandemia que atrapó a nuestra sociedad en su conjunto, la que nos debe encontrar unidos en la lucha para desterrarla como cultura imperante”.
“Queremos ser escuchados y ayudar a construir el país que todos aspiramos, por ello, hemos decidido no tener una posición consentida a cualquier acción del Estado que signifique daño o postergación de una sociedad que no tolera más esperar pasivamente un cambio que mejore su calidad de vida y su futuro”, concluyó la presentación.