Más allá de los desafíos señalados por la Presidenta, el Ejecutivo nacional anunció en los últimos meses diferentes proyectos para la nueva fábrica estatal. Uno de ellos sería realizar el mantenimiento de aeronaves para Aerolíneas y Austral. Otra iniciativa sería fabricar piezas para la compañía brasileña Embraer, a quien el Gobierno nacional considera un aliado estretégico. Por último, se maneja la posibilidad de desarrollar un avión de entrenamiento para pilotos militares junto a la empresa estatal chilena Enaer. El funcionario nacional Oscar Cuattromo estimó que la empresa podría costar al Estado 67 millones de pesos. Otros 40 millones se destinarían a recuperar su capacidad. El proyecto deberá pasar ahora por el Congreso, aunque nadie quizo arriesgar plazos respecto a cuándo estaría aprobado y promulgado.
Columna de JusCom
Los desafíos de la comunicación judicial en tiempos turbulentos Por Marcelo Baez (*) El viernes 26 de enero el diario Ámbito Financiero...