El presidente Javier Milei se reunió con el CEO de Coca Cola, James Quincey, y participó de un encuentro de trabajo con directivos de empresas y holdings antes quienes reveló sus intenciones de cerrar un tratado de libre comercio con Estados Unidos.
“Tenemos una cordillera rica en litio, plata, oro, cobre y uranio, de los cuales hoy exportamos prácticamente cero por caprichos ideológicos de antaño. Es por esto que estamos buscando avanzar con un tratado de libre comercio con Estados Unidos, y ojalá podamos replicarlo con todas las naciones del mundo”, reveló durante el evento que recibió el nombre de Country Strategy Dialogue on Argentina. Fue en el marco de su estadía en Suiza y, luego de exponer en el Foro Económico Mundial de Davos.
Para Milei, la Argentina tiene casi 200 clientes potenciales esperando sus bienes y servicios, y ante este escenario la historia del país “es una hoja en blanco esperando ser escrita”.
Durante su discurso, el mandatario destacó sus puntos centrales de gestión: “El año pasado alcanzamos un hito económico innegable: logramos tener superávit fiscal sostenido sin estar en default de deuda por primera vez en 123 años de historia”.
Luego de haber disertado en Davos, con una fuerte crítica al feminismo y la ideología woke, puntualizó: “La bomba hiperinflacionaria que dejaron nuestros predecesores y la pésima reputación crediticia que arrastrábamos como país nos obligó a convertirnos en el mejor alumno de la clase en materia económica. La alternativa era entrar a una crisis económica y social sin precedentes en nuestra historia”.
“Al asumir teníamos 15 puntos de déficit consolidado entre nuestro Tesoro y nuestro Banco Central, lo que significaba emisión monetaria y espiral inflacionaria”, contó, y añadió: “Lo primero que hicimos fue realizar un ajuste por esos 15 puntos y le pusimos fin a la emisión monetaria. Fruto de esto, la inflación mayorista anualizada pasó de 17.000% en diciembre de 2023 a 10% en diciembre de 2024”.
Por su parte, se jactó de que la brecha cambiaria entre el dólar oficial y el paralelo se haya reducido, e insistió en la recuperación de los salarios. “Nuestra brecha cambiaria entre el dólar oficial y el paralelo era de 180% y ahora está prácticamente extinta, habiéndose apreciado nuestro tipo de cambio paralelo un 40% en el proceso, motivo por el cual el salario promedio pasó de 300 dólares a 1100 dólares”, subrayó.