Metalúrgicos relevan una retracción de 7,6% en el año

La producción metalúrgica registró en noviembre una disminución de 7,1% interanual y acumula una caída de 7,6% en lo que va del año, de acuerdo con un informe de la Asociación de Industriales Metalúrgicos de la República Argentina (Adimra) presentado ayer.
La actividad alcanzó así 19 meses consecutivos de retracción y en noviembre la utilización de la capacidad instalada se ubicó en 56,3%, por debajo del mismo mes del año anterior.
Los rubros que presentaron mayores bajas en su producción fueron fundición (-13,4%), bienes de capital (-12,7%) y autopartes (-11,9%). En cuanto al desempeño metalúrgico por cadenas de valor, la actividad que más traccionó a la caída fue la automotriz (-11,1%), seguida del sector de construcción e infraestructura (-5,4%).
En detalle, la producción metalúrgica de Córdoba sufrió una caída de 9,3% en términos interanua-
les; Entre Ríos presentó una disminución de 6,7%; y en Buenos Aires (incluyendo CABA) la contracción fue de 5,9%.
Al tener en cuenta el interior de la Provincia de Buenos Aires, la caída fue de 3% interanual, mientras que en la ciudad de Buenos Aires y Gran Buenos Aires la producción disminuyó 6,8%.
Por otro lado, la Provincia de Santa Fe experimentó un incremento de 2,7%, indicó Adimra.
El informe se refirió además al empleo en el sector, que se redujo 1,8% con relación a noviembre de
2018, con una caída acumulada de 2,2% en los primeros once meses del año.
De este modo, el empleo metalúrgico retornó a los niveles de 2007. En tanto, 43% de los empresarios indicó haber reducido su plantilla de personal; 46% de las empresas redujeron las horas extras; y 16% indicó una reducción en la jornada laboral durante noviembre. Asimismo, 11% de los empresarios afirmó haber solicitado el Programa de Recuperación Productiva (Repro) o proceso preventivo de crisis.
En noviembre, las expectativas mejoraron levemente, sin embargo 36% de las empresas prevé una disminución en su producción para el trimestre diciembre-febrero.
«La posibilidad de que el sector retome la senda de crecimiento en 2020 estará determinada por el mayor dinamismo del mercado interno, el acceso al financiamiento a tasas compatibles con la producción, una inserción internacional que priorice la agregación de valor y la conformación de acuerdos básicos entre empresarios, trabajadores y el Gobierno», concluyó Adimra.