Las ventas en supermercados bajaron 12,7 por ciento en julio en términos interanuales y acumularon 13 descensos consecutivos, informó ayer el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec).
Algo similar ocurrió con las ventas en los shoppings que, medidas a precios constantes, se contrajeron 9,8 por ciento en julio con respecto al mismo mes del año anterior, y también marcaron la decimotercera baja consecutiva.
Producto de la inflación, en la medición a precios corrientes la facturación en los súper alcanzó en julio 55.080,7 millones de pesos, lo que significó un incremento interanual de 40,2 por ciento. En el caso de los centros de compras, las ventas a valores corrientes totalizaron 9.837 millones de pesos, 35,8 por ciento más que en julio de 2018.
En los supermercados, en relación con las ventas totales a precios corrientes, los grupos de artículos con los aumentos más significativos durante julio pasado respecto al mismo mes de 20l8 fueron lácteos (53,6 por ciento), carnes (51,2 por ciento), artículos de limpieza y perfumería (43,1 por ciento) y almacén (42,5 por ciento).
El informe publicado por el Indec resaltó además que se produjo una caída de 4,1 por ciento en la cantidad de personal ocupado en este grupo, en comparación con el mismo mes de 2018. En la relación intermensual, el recorte de personal fue de 0,7 por ciento, dejando un total de 95.416 trabajadores en el sector.