Las acciones preferenciales de la petrolera estatal brasileña Petrobras caían este lunes más de 6% y arrastraban el principal índice de la Bolsa de San Pablo (Bovespa) a una baja superior a 3%, después de la asunción de Luiz Inácio Lula da Silva como presidente de Brasil.
En una de sus primeras decisiones de gobierno publicadas este lunes, Lula revocó los procesos de privatización de ocho empresas estatales, entre ellas Petrobras y Correios, iniciados durante la administración de Jair Bolsonaro.
Los papeles preferenciales de la petrolera caían 6,6%, mientras que los ordinarios retrocedían 5,7% pasado el mediodía, en medio de “una aversión al riesgo por parte de inversores ante las señales de un mayor intervencionismo del Estado”, según consignó la agencia France Presse (AFP).
El desplome de Petrobras, una empresa estatal de capital abierto, empujaba a una caída de 3,1% al IBovespa, en un día sin negociaciones en los principales mercados del planeta por el feriado extendido de Año Nuevo.
“La reacción del mercado responde a varios factores, entre los que se cuentan la prórroga de una reducción de impuestos federales sobre los combustibles decidida por Lula y la posibilidad de que la política de precios de la compañía sea modificada“, dijo el analista financiero Gilberto Braga ante la consulta de AFP.
“Hay una lectura del mercado de que habrá una injerencia cada vez mayor en las directrices de las compañías estatales, un retroceso respecto a una conducción más liberal”, agregó Braga.
El senador Jean Paul Prates, indicado por Lula para presidir Petrobras, aseguró el viernes pasado que la política de precios de la petrolera cambiará, sin brindar mayores precisiones al respecto.
Durante la campaña electoral, Lula criticó las privatizaciones llevadas adelante por Bolsonaro y advirtió de que durante su administración no serían vendidas otras firmas estatales.